En abril se conocieron los primeros detalles sobre la nueva consola de Sony y este martes la firma ratificó oficialmente que el nombre será PlayStation 5.
Si bien no es novedad que la denominación sea PS5, los fanáticos ahora pueden comenzar a ahorrar para el lanzamiento que ya tiene una fecha definida: la consola saldrá a la venta a finales de 2020.
Si bien no hay precios de salida, ya hay confirmaciones sobre las funciones altamente discutidas en internet las cuales, según los fans, deberían fijar un estándar mucho más elevado en materia gráfica respecto a la actual.
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En detalles exclusivos obtenidos por Wired, PlayStation confirmó que incorporarán ray-tracing en el GPU, una obsesión de los amantes de la calidad, altamente demandante, que permite -entre otras cosas- reflejos en tiempo real en las superficies relativos al entorno y con distorsiones realistas propias de los materiales (como el agua o el metal, por ejempl0).
Además, enfatizan en que el SSD incorporado no sólo acelerará los tiempos de carga de la consola, sino que también ayudará a guardar espacio crucial para almacenar los títulos de la biblioteca.
“Más que tratar los juegos como grandes bloques de datos, estamos permitiendo un acceso a los datos de fino granulado”, dice el arquitecto del sistema, Mark Cerny.
Así, explica que se podría, por ejemplo, dejar solamente instalado el modo multijugador y borrar (o elegir no instalar) la campaña para un jugador al terminarla.
También -calmando algunos temores dentro de la comunidad- confirman que sí tendrá discos físicos de 100 Gb y que el lector de la consola también funcionará como reproductor Bluray 4K.
Con todo, no quisieron referirse a si está contemplada la incorporación un asistente de voz como puede ser Cortana en Xbox. “Hablaremos más de eso en otra ocasión”, dijo Cerny.
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Un control más inmersivo
Modificaciones en las funciones del L2 y el R2 se aproximan como los cambios más relevantes en la siguiente generación de PlayStation.
Según revelaron, el mando ahora incorporará “gatillos adaptativos”, los cuales tendrán más o menos resistencia según el juego y la acción que se está ejecutando.
A eso se suma el “feedback háptico” con un nuevo sistema de vibración más avanzado que en el actual DualShock 4 que permite “sentir” de mejor manera las distintas texturas del terreno, como la nieve, el concreto, la arena o el agua.
Sony sigue sin revelar cuánto costará el PlayStation 5 al salir. Sin embargo, se especula -según los precios sugeridos en el retail en lanzamientos anteriores- que podría estar entre los US$ 400 y US$ 500 en el mercado norteamericano.
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