La bancada disidente del Congreso Nacional, compuesta por las diputadas Emilia Schneider, María Francisca Bello, Marcela Riquelme y Camila Musante, criticaron la franja del Rechazo en donde aparece una trabajadora sexual trans que asegura no denunciar a su agresor “por amor”.
“Es inaceptable avalar la impunidad de cualquier delito, en todo contexto, en especial en una campaña política. Esta franja de la impunidad es una afrenta gravísima a todas las víctimas de violencia y discriminación, sobre todo a las familias de personas LGBTQIA+ asesinadas y a las organizaciones y activistas que hemos luchado por años en apoyar cada caso”, manifestaron las diputadas.
Del mismo modo, recalcaron que en Chile, según el informe 2021 de la Red Latinoamericana y del Caribe de Personas Trans, el 33,3% de los ataques que sufren personas trans son a través de golpizas o agresiones físicas, y el 4% se traduce en asesinatos: “Se trata de la discriminación más grave que afecta a las diversidades y disidencias sexuales y de géneros, que exige una respuesta institucional inmediata”.
Por otro lado, recordaron que “el artículo 27 de la propuesta de Constitución asegura el derecho a vivir en un mundo libre de violencia de género, debiendo el Estado prevenirla, investigarla y sancionarla. El 312 imprime al sistema judicial, una necesaria perspectiva de género. Por ende, los sectores del Rechazo no cuentan con propuestas de reforma institucional para dar firme respuesta a estos macabros crímenes que afectan en especial a mujeres y diversidades y disidencias sexogenéricas“.
“Una vez más, el Rechazo miente al afirmar que las iniciativas populares de norma constitucional fueron desechadas: casi la mitad de las presentadas fueron discutidas e incorporadas a la propuesta final, de las cuales tres fueron propuestas por organizaciones LGBTQIA+ a través de la articulación Disidencias Unidas Recomponiendo Alianzas Sexopolíticas (D.U.R.A.S.). Por ende, condenamos la instrumentalización de esta trágica historia“, sostuvieron.
En la misma línea, aseveraron que “rechazar implicaría desconocer el avance civilizatorio que supondría convertir a Chile en el primer país del mundo con un reconocimiento constitucional de las diversidades y disidencias sexuales y de género, con este nivel de amplitud y detalle”.
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Por todo lo anterior, exigieron al Comando del Rechazo unas “disculpas públicas a cada una de las víctimas de crímenes de odio homo-lesbo- trans-odiante, en especial a las trabajadoras sexuales, a sus familias y redes de cuidado y comprometerse a no exhibir más esta franja de la impunidad”.
Finalmente, realizaron un llamado a “no avalar la impunidad y denunciar cada ataque que reciban por su orientación sexoafectiva, características sexuales o identidad o expresión de género, directamente al Ministerio Público, a las Policías o a organizaciones de la sociedad civil”.
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