La primera “selfie” se registró en 1839, por lo que el “formato” tiene 180 años, pero ¿por qué son un problema? Las estadísticas indican que 259 personas murieron entre 2011 y 2017 tratando de tomarse una en situaciones extremas, según un estudio global de 2018 (octubre 2018). Para diciembre de 2018 ya eran 260.
En el estudio realizado, también destacan que la mayoría de fallecidos son hombres, representando un 72.5% del total, mientras que las mujeres fallecidas por selfies equivalen al 27.7%. A su vez la media de edad de las víctimas fue de 22 años, el 50% tenía entre 20 y 29 años, y el 36%, entre 10 y 19 años.
La mayoría de autorretratos fatídicos ocurrieron en cumbres, rascacielos, lagos y con algún medio de transporte de por medio. Sin embargo, hay veces que estas fotos pasan a llevar lugares históricos, tal como ocurrió el pasado 22 de marzo luego que el museo del campo de concentración de Auschwitz pidiera a los visitantes no hacerse “fotos frívolas”, porque las personas insistían en tomárselas en las vías del tren.
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Los límites entre lo público y lo privado: Tanto la selfie como las RRSS son un espacio vinculado a lo “público”, tal como señalan varios autores, la necesidad de pertenencia se ve manifiesta en estos espacios simbólicos en los cuales se comparte un momento de vida con otros. La inexistencia o no comprensión de lo privado v/s lo público, ha generado hoy una nueva problemática asociada al mal uso de las imágenes: adolescentes que se sacan fotos con poca o nada de ropa (conocida como la tendencia de “enviarse packs” que son una o más fotos eróticas que comparten, principalmente adolescentes, en RRSS privadas, pero que han sido muchas veces difundidas sin consentimiento y han sido el origen de bullying o incluso trata de blancas) o excesiva necesidad de registrar todo lo que se vive y dónde (gracias a la geolocalización).
El inconsciente proceso: Las mujeres tienden a tomarse fotos con un ángulo alto cuando saben que su foto será vista por hombres (para mostrar sumisión). Las mujeres, a su vez, se tomarán fotos de frente, cuando saben que su foto será vista por otras mujeres (para mostrar empatía).
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