El Ministerio de Justicia gestionó el cambio en la duración del pasaporte. El documento pasará de una vigencia de 5 años a 10 años, extendiendo así el uso de este.
La medida comenzará a regir 15 días después de su publicación en el diario oficial, es decir, todos los pasaportes que se emitan desde el 1 de febrero de este año, durarán hasta el 2030.
Según consigna el documento oficial, “los pasaportes ordinarios expedidos con anterioridad a la entrada en vigencia del presente decreto, mantendrán su validez hasta la fecha de vencimiento que en ellos se señale, y no podrán ser revalidados, debiendo otorgarse un nuevo pasaporte válido por diez años, en caso de ser requerido”.
Esto quiere decir que los documentos vigentes mantendrán su fecha de vencimiento, debido a que modificar la duración de los pasaportes antiguos implicaría “un problema de seguridad”, según detalló el titular de la cartera Hernán Larraín.
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Además, el ministro acusó que esta medida “es un avance significativo” debido a que “solo en el año 2019 se renovaron 451 mil pasaportes”.
En cuanto al precio del documento, Larraín explicó que el ejecutivo o legislativo no pueden modificarlo, ya que este depende de la empresa que se adjudique la licitación de los documentos, en este caso, es la empresa francesa Morpho.
Actualmente “estamos empezando el proceso de licitación de una nueva empresa. Esperamos que esta licitación pueda redundar en un pasaporte menos costoso, aunque si por el mismo precio, en lugar de durar 5 años dura 10, estamos reduciendo el costo” mencionó el ministro.
A la fecha, el costo del documento, tanto de 32 como de 64 páginas, rodea los 90 mil pesos.
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