La estudiante de Trabajo Social de la Universidad de Chile, Polette Vega, denunció haber sido víctima de un nuevo episodio de agresión y discriminación por parte de sus compañeros al interior de la casa de estudios.

De acuerdo a una publicación de La Tercera, la situación se remonta al 24 de septiembre pasado, cuando volvió a clases luego de estar un tiempo alejada debido a un primer ataque que relata haber vivido en julio, cuando un grupo de encapuchados la amedrentó y tironeó por su postura política.

Esta vez, contó, se sentó en el último puesto de su clase para “pasar piola” pero no lo logró. “Una compañera se paró de su puesto y me increpó, me preguntó qué estaba haciendo en la sala. Le dije que estaba en clases y ella paró la clase y dijo que se iba a ir, porque no podía estar en la sala con alguien que pensara como yo. Otra persona hizo lo mismo, y otro dijo que la que me tenía que ir de la sala era yo”.

Además relató que los compañeros le pidieron al profesor tomar una postura sobre si ella debía estar en la sala o no, y que él les dijo que si lo obligaban a tomar partido, entonces renunciaría, porque esa no era la Universidad de Chile en la que quería estar. “Empecé a llorar y luego una compañera me tiró una botella de agua encima, mojando mi ropa y mis apuntes. Me quedé sentada llorando”, agrega.

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La joven es militante del colectivo Centro Derecha Universitaria (CDU) y asegura que en el campus Juan Gómez Millas el clima de intolerancia es grave. Para su caso tuvo que intervenir la jefa de carrera y luego de eso, no ha vuelvo a clases y su facultad le ofreció un plan alternativo de estudios para que no tenga que ir al campus.

Su caso no es el único. El ataque que sufrió en julio se suma a la agresión que el mismo sufrió el hijo de la diputada Cristina Girardi (PPD) en la misma facultad y, por esta razón, la casa de estudios creó una mesa de trabajo para erradicar la violencia.

Dicha instancia está formada por decanos y representantes de los estamentos del campus, con el objetivo de atacar la violencia. En la casa de estudios explican que ese grupo se reúne semanalmente y que ya están elaborando propuestas.

“Esto no es casual ni fortuito, es una intolerancia generalizada, donde la ultraizquierda se pasa de la raya y reproduce lo mismo que critica. Y le cabe responsabilidad a las autoridades y a los profesores, porque muchos son sesgados y les enseñan solo una visión de las cosas a cabros que recién salieron del colegio”, agregó Polette, quien anticipó que postulará a la presidencia de la Fech, para levantar la consigna contra la violencia.

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