ISIS se atribuyó la responsabilidad de una explosión mortal que causó varias muertes en una ciudad siria en la que estaban desplegados soldados estadounidenses que conformaban una milicia que controla la ciudad y un grupo de control con sede en el Reino Unido.
Miembros de las fuerzas estadounidenses murieron en el ataque, según un tuit del portavoz de la Operación Inherente de Resolución liderada por los Estados Unidos.
Aún no se sabe cuántas personas fallecieron.
La agencia Amaq afiliada a ISIS dijo que el ataque fue perpetrado por un atacante suicida con un chaleco explosivo.
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“Una explosión en la ajetreada calle comercial de Manbij, informes iniciales de víctimas”, escribió en Twitter el portavoz del consejo militar de Manbij, Shervan Darwish.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos con sede en el Reino Unido dijo que al menos ocho personas murieron.
La secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Sarah Sanders, dijo que se ha informado al presidente Donald Trump sobre la situación.
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El ataque se produce menos de un mes después de que el presidente estadounidense anunciara que las tropas de su país se retirarían de Siria.
Al hacer su anuncio, Trump declaró en un vídeo publicado en Twitter: “Hemos ganado contra ISIS. Los hemos vencido y los hemos derrotado. Hemos recuperado la tierra y ahora es el momento de que vengan nuestros soldados a casa”.
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