(CNN en Español)- Clarissa Ward, corresponsal internacional en jefe de CNN, se volvió el punto de referencia para la cobertura de CNN y los grandes medios de comunicación sobre la situación en Afganistán los últimos meses.
La experimentada periodista, quien ha reportado durante más de 15 años desde las primeras líneas de batalla en todo el mundo, desde Siria, Iraq y Afganistán a Myanmar e Irán, habló con María O’Donnell para Conecta2 de CNN acerca de los aprendizajes de la cobertura, cómo la trataron los talibanes durante su exhaustiva reportería, la posición de las mujeres en el mundo laboral y los desafíos de los medios.
Ward, nombrada Corresponsal del Año por los premios Gracies en 2019, dice que ha visto lo peor y también lo mejor de la humanidad. Además, señala que siente curiosidad por pasar más tiempo en América Latina.
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Ward es autora de On All Fronts: The Education of a Journalist, un libro de memorias que cuenta su singular carrera como reportera de conflictos y cómo ha documentado la violenta reconstrucción del mundo desde cerca.
Esta es la transcripción en español de la entrevista, editada levemente para mayor legibilidad.
María O’Donell: Me gustaría preguntarte sobre tu última cobertura en Afganistán. ¿Qué crees que dejaste allí cuando te fuiste?
Clarissa Ward: Bueno, creo que dejé atrás a muchas personas muy desesperadas y asustadas que no tienen idea de cómo va a ser el futuro de su país. No es que a todos en Afganistán les guste Estados Unidos. De hecho, eso está lejos de ser verdad. Pero todavía existe una profunda preocupación, particularmente en las zonas urbanas, particularmente para las mujeres, sobre cómo será la vida bajo el gobierno talibán. Los talibanes han dicho que han cambiado, que son más pragmáticos y maduros y diplomáticos. Pero, hasta ahora, para ser honestos, realmente no hemos visto nada en el territorio que le de crédito a esa declaración. Y, por lo tanto, creo que hay una gran preocupación sobre lo que sucede, particularmente cuando los afganos ahora enfrentan no solo una crisis política, sino también una potencial crisis económica.
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