La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, aseguró que si no se acuerda una agenda de protección sobre los derechos y libertades fundamentales de los pueblos, los jóvenes y niños podrían heredar una serie de crisis relacionadas con los DD.HH.
“No entreguemos a nuestros jóvenes y a sus hijos una tormenta incontrolable de crisis de derechos humanos que se cruzan y se intensifican”, dijo la ex mandataria chilena en el marco de la inauguración de la 43º sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, en Ginebra.
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Citando al médico pediatra e inventor de la vacuna contra la polio, Jonas Salk, Bachelet señaló que “para ser buenos ancestros debemos preparar, para nuestra gente joven y las próximas generaciones, un mundo que puede ofrecer vidas dignas, en libertad y paz”.
En la actividad también estuvo presente el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, quien hizo un “llamado a la acción” articulado en siete áreas en derechos humanos, incluyendo la persecución de las minorías, pueblos indígenas y los “niveles alarmantes de femicidios”.
“Vemos un retroceso contra los derechos de las mujeres, niveles alarmantes de femicidio, ataques contra defensoras de derechos humanos y la persistencia de leyes y políticas que perpetúan la subyugación y la exclusión“, señaló al respecto.
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Enfatizó que el trabajo hacia la igualdad de género “comienza dentro”, detallando que la ONU ya había logrado la paridad de género en sus rangos más altos y afirmó que se logrará lo mismo en todo el sistema de la organización internacional para el 2028.
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