(CNN) – Más de 100 años después de los crímenes cometidos por el poder colonial alemán en lo que ahora es Namibia, Alemania ha reconocido formalmente las atrocidades cometidas contra los grupos étnicos Herero y Nama como genocidio.
Alemania apoyará a Namibia y los descendientes de las víctimas con 1.100 millones de euros (1.300 millones de dólares) para la reconstrucción y el desarrollo y pedirá perdón por los “crímenes del dominio colonial alemán”, dijo el viernes el ministro de Relaciones Exteriores alemán, Heiko Maas, en un comunicado.
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“Nuestro objetivo era y es encontrar un camino común hacia la reconciliación genuina en memoria de las víctimas. Esto incluye nombrar los eventos del período colonial alemán en lo que ahora es Namibia, y en particular las atrocidades en el período de 1904 a 1908, sin escatimarlos o pasarlos por alto. Ahora también llamaremos oficialmente a estos eventos lo que fueron desde la perspectiva de hoy: un genocidio”, dijo Maas.
El gobierno de Namibia vio la aceptación formal de las atrocidades como un genocidio como un paso clave en el proceso de reconciliación y reparación, dijo el viernes a CNN el secretario de prensa presidencial de Namibia, Alfredo Hengari.
“Estos son avances muy positivos a la luz de un proceso muy largo que se ha acelerado en los últimos cinco años. La gente nunca olvidará este genocidio; viven con él. Y este es un proceso importante en términos de curar esas heridas”, dijo.
Grupo de víctimas rechaza trato
Sin embargo, los grupos de víctimas han rechazado el trato. Vekuii Rukoro, el jefe supremo del pueblo Herero, ex fiscal general y miembro del parlamento, le dijo a CNN que no formaban parte de la discusión con el gobierno alemán.
“¿Es este el tipo de reparación por el que se supone que debemos estar emocionados? Esto es solo una relación pública. Este es un trabajo vendido por parte del gobierno de Namibia. El gobierno ha traicionado la causa de mi pueblo”, dijo.
Rukoro dijo que los grupos de víctimas Herero y Nama esperan reparaciones monetarias. Dijo que las reparaciones no tenían por qué ser para personas individuales, sino que deberían consistir en un pago colectivo a los descendientes de los asesinados y expulsados de sus tierras durante el genocidio.
Agregó que el presidente alemán no es bienvenido en el país del sur de África.
“El presidente de Alemania no es bienvenido aquí en lo que respecta a las comunidades de víctimas. Es persona non grata”, dijo.
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Un sangriento conflicto
Las tropas alemanas mataron hasta 80.000 personas herero y nama en el país del sur de África entre 1904 y 1908 en respuesta a un levantamiento anticolonial, según el Museo Conmemorativo del Holocausto de Estados Unidos.
Según los historiadores, el sangriento conflicto ocurrió cuando los indígenas Herero se rebelaron contra las tropas coloniales por la toma de tierras. Alemania, que hoy brinda ayuda para el desarrollo a Namibia, ofreció su primera disculpa formal por el conflicto en 2004.
Ambos países habían estado en conversaciones desde 2015 para negociar una compensación por la masacre de las fuerzas coloniales alemanas. Maas dijo en su declaración que los representantes de las comunidades Herero y Nama estaban “estrechamente involucrados” en las negociaciones del lado de Namibia.
“Los crímenes del dominio colonial alemán han agobiado durante mucho tiempo las relaciones con Namibia. No se puede cerrar el libro sobre el pasado. Sin embargo, el reconocimiento de la culpa y nuestra solicitud de disculpas es un paso importante para llegar a un acuerdo con los crímenes y dar forma el futuro juntos “, dijo Maas.
Los medios alemanes informan que el presidente alemán Frank-Walter Steinmeier hará una solicitud oficial de perdón en una ceremonia en el parlamento de Namibia.
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“La decisión sobre un posible viaje del presidente federal se tomará después de que los gobiernos hayan llegado a un acuerdo formal y en estrecha consulta con la parte namibia”, dijo a CNN un portavoz de la oficina del presidente federal.
El anuncio se produce un día después de que el presidente francés, Emmanuel Macron , reconociera públicamente la “abrumadora responsabilidad” de Francia en el genocidio de 1994 en Ruanda y dijera que solo los sobrevivientes podían dar “el regalo del perdón”.
En 1994, alrededor de 800.000 tutsis, principalmente étnicos, fueron asesinados por milicias hutu apoyadas por el gobierno de Ruanda. Francia ha sido acusada de no haber evitado el genocidio y de haber apoyado al régimen hutu, incluso después de que comenzaran las masacres.
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