A 40 kilómetros de Santiago se encuentra una isla muy particular y pionera en el mundo minero. Se trata de una instalación flotante de 256 paneles solares, los cuales buscan reducir las emisiones y la evaporación en el relave Las Tórtolas.
“Genera lo equivalente a 70 casas. Esta área cubierta son 1.200 m² y ahorra alrededor de 150 toneladas de dióxido de carbono anualmente“, detalló María Loreto Maturana, especialista de proyectos de energía en Anglo American.
En el año 2019 se implementó esta iniciativa piloto de Anglo American. En una acción inédita para la industria, decidieron aprovechar un tranque de relave minero ubicado en Colina para darle un nuevo valor ambiental.
“Surge a través de la idea de complementar lo que es energía limpia con la eficiencia hídrica. Esta tecnología se usa en algunas partes del mundo sobre todo en embalses de agua”, añadió Maturana a Minería 360°.
Los paneles entregan la energía para la planta. De esta manera, la generación limpia es aprovechada en la recirculación de residuos mineros que llegan del yacimiento Los Bronces. Así, este depósito de relaves forma parte de un avance valioso en torno a una minería más sustentable.
“La minería verde es un concepto que se ha venido elaborando para transformar o movilizar la industria extractiva hacia una posición en donde es más amigable”, explicó Álvaro Videla, académico de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Católica (UC).
Todos estos cambios pretenden cuidar el medio ambiente, respetar a las comunidades, pero también aprovechar las oportunidades que se puedan tener en el desarrollo económico. Un primer paso es lograr una reducción considerable de emisiones de carbono en sus procesos.
“Mirando la minería como un sistema productivo, la producción de emisiones tiene distintas fuentes en diferentes etapas. La generación se produce en forma indirecta a partir del consumo eléctrico, por lo que, para reducir las emisiones, tenemos que atacar la generación eléctrica”, sostuvo Videla.
A la generación eléctrica es donde ya están apuntando algunas empresas en el país. Según datos de la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco), se espera que en tres años más, el 65% de la demanda de la industria sea de energías renovables no convencionales.
En BHP ya se pusieron ambiciosas metas. Su objetivo global es reducir a 2030 el 30% de las emisiones mientras que, a nivel local, el desafío es mayor. “En 6 meses vamos a concretar un hito importante que es transitar casi al 100% de energías renovables en los contratos de electricidad”, detalló Sebastián Grecco.
“Eliminará cerca del 70% de las emisiones operacionales de nuestras faenas en los próximos 6 meses (…) Esto significa remover alrededor de 3 millones de toneladas de CO2 al año, lo que es equivalente a sacar alrededor de 700 mil vehículos del parque automotriz”, añadió Greeco, quien es Head of Strategic Services de BHP.
Si bien las acciones de BHP son a gran escala, también hay otras que contribuyen a lograr una minería verde. “Cuando nos acercamos a la mina, a las actividades relacionadas al movimiento de tierra, ahí tenemos emisiones producto de la combustión de combustibles fósiles. Por ende, las mineras deben utilizar de mejor manera ese fósil o cambiarlo“, sostuvo Videla.
Eso es lo que está haciendo hoy El Teniente, ya que su meta es reducir en un 70% sus emisiones de dióxido de carbono a 2030. Un primer paso es avanzar a un 100% de electromovilidad y hoy en sus faenas ya se pueden apreciar una flota de buses eléctricos para trasladar a trabajadores, camionetas para apoyar trabajos logísticos e incluso un tren eléctrico.
Todas estas acciones son parte de los ejemplos que hoy se pueden ver en una industria que camina hacia un proceso más sustentable.
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