La pandemia ha involucrado una serie cambios que, sumado al temor de contraer COVID-19, han causado un grave desgaste emocional. Al respecto, nuevos términos han ido evolucionado a lo largo de estos meses para explicar algunos de los problemas asociados a la salud mental.
“Han surgido diferentes conceptos que tratan de dar cierta estructura u organización a las variadas vivencias o situaciones que han tenido las personas (…) durante todo este año 2020 y 2021”, manifestó María Elena Pérez, psicóloga clínica y académica de la Universidad de los Andes.
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En conversación con CNN Chile, la especialista sostuvo que estos conceptos retratan lo vivido por los individuos desde que se reveló el primer caso en el país, el pasado 3 de marzo del 2020. El más conocido es el llamado “síndrome de la cabaña”, al cual se suma el “hastío social”.
Según Pérez, la situación está cambiando debido a la disminución de las restricciones. “Esto enfrenta a las personas, y nuevamente se pueden reactivar una serie de vivencias, que van desde la felicidad por poder salir o juntarse (…) hasta una cierta resistencia”.
“Esta posibilidad de volver a abrirse a una interacción parecida a lo que teníamos antes de la pandemia es un nuevo proceso de adaptación y venimos ya agotados. Tuvimos un año donde nos hemos tenido que adaptar y re adaptar a diferentes situaciones”, añadió.
La psicóloga clínica detalló que el desgaste emocional se debe, en gran parte, al estrés sostenido durante estos meses. “El ser humano no está preparado para poder mantener su respuesta al estrés tanto tiempo (…) y a todos se les ha removido su sistema de vida”.
“La reorganización de la vida cotidiana nos implica un desgaste de energía psíquica, física y emocional que es natural que así sea, pero esto ha durado mucho más de lo que cada uno puede estar preparado para hacer y sostener a lo largo del tiempo”, concluyó Pérez.
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