¿Qué representa el nuevo Partido Republicano? La respuesta rápida es decir que es la expresión chilena de la ola populista que ha tomado fuerza en Europa, Estados Unidos o Brasil. Claro, se ubica a la derecha de los partidos tradicionales, con un discurso anti élites, usando términos como la “dictadura gay” y abusando de una gran virulencia en redes sociales.
Pero esa es sólo parte de la historia.
Su líder, José Antonio Kast, está lejos de ser un outsider: fue diputado por 16 años y secretario general de la UDI. La mayoría de la dirigencia del nuevo partido también proviene del gremialismo.
El secretario general Jorge Barrera, el prosecretario Antonio Barchiesi, el diputado Igancio Urrutia, la ex gobernadora Susana Verdugo, la concejala Viviana Núñez y el ex candidato a diputado Francisco Castellón, todos ellos vienen de la UDI.
También sus principios como el tradicionalismo en temas valóricos, la reivindicación de algunos aspectos de la dictadura y una política económica de ortodoxia liberal, son los que ha enarbolado siempre la derecha conservadora; no hay hasta aquí el nacionalismo económico, por ejemplo, de un Trump.
Este Partido Republicano no es una simple réplica de un fenómeno internacional. Más bien es un movimiento con formas nuevas cercanas al populismo de redes sociales y contenidos y protagonistas propios de la derecha conservadora.
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