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Juan March es el nombre de un jugador argentino que tuvo una actitud repudiable en contra de Daiana Quintana, arbitra que dirige la Liga Amateur Platense en Argentina e impartió justicia en la disputa entre el Everton y Universitario de Berisso.

Luego de ser expulsado por la jueza central del encuentro, el futbolista no encontró una mejor forma de enfrentar la situación que espetando insultos machistas en contra de Quintana.

Según lo informado por el medio transandino Olé, March expresó reprimendas como “anda a lavar los platos” y aludió a que una mujer “no puede dirigir ni mirar fútbol”, según contó la propia víctima de las agresiones verbales.

Quintana dijo después del partido que no recibió los gritos del jugador solo al momento de ser expulsado, sino que posterior a aquello, en vez de irse a los camarines, tomó posición en las tribunas, desde donde continuó con su falta.

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“Más allá de cuestiones del partido que pasamos siempre, las mujeres que dirigimos, que nos insultan, queda en el partido. Cuando terminó, esa persona se quedó en la hinchada y siguió con los insultos”, señaló.

A raiz del hecho, el Tribunal de Disciplina de la liga en cuestión tomó parte del acontecimiento y, en voz de su presidenta, Cecilia Draghi, sostuvo que “la agresión a la árbitra no fue sólo por su condición de jueza. En su rol siempre se producen resquemores, pero ella fue agredida por su condición de mujer“.

“Parece mentira que alguien a una mujer quiera decirle que su rol es lavar los platos. Esto es patriarcado en su expresión máxima“, agregó Draghi.

El ente rector decidió sancionar a March con la imposibilidad de jugar las próximas 15 fechas a raíz de la violencia machista mostrada dentro y fuera del campo.

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