En casi cuatro años de existencia, la banda chilena Niños del Cerro ha tenido una evolución natural, siguiendo paso a paso el camino con cada puerta que se ha abierto, sin forzar las circunstancias.
Pasaron de mostrar sus canciones en hogareñas tocatas en la comuna de La Florida, a abarrotar locales nocturnos de Santiago y regiones, y ser parte de algunos festivales locales con un primer disco, Nonato Coo (2015). Este año lanzaron su sucesor, Lance, con el apoyo del sello nacional Quemasucabeza (que edita a Gepe, Fakuta, Pedropiedra, entre otros), el cual los llevó a llevar sus canciones a Argentina, Perú y México.
Niños del Cerro lanzan Lance este viernes 7 de diciembre en Matucana 100, oportunidad en la que prometen tocar por más de dos horas con invitados y visuales especiales.
Pocos días después de ese viaje, el líder del grupo, Simón Campusano, solo saca cuentas alegres de este 2018: “Hemos tocado caleta, especialmente este último semestre, y estamos felices. Nos llevamos bien y ahora con la gira nos hicimos hasta más amigos, ya somos como hermanos”.
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Entre los hitos más memorables de ese mes de viaje son haber tocado a sala llena en el DF mexicano antes de ver a Pixies en el Zócalo, las experiencias compartidas con bandas como Gutiérrez, Limbo Junior, Las Ligas Menores y Joliette, y los nuevos públicos que se acercaron a cada uno de los shows.
-¿Las experiencias son muy distintas a las que hay acá?
No, es lo mismo en todos lados. Guardando las proporciones, las ciudades son más grandes, más o menos gente, pero las experiencias son bastante similares para bien y para mal. Quizás hay más lugares, como Buenos Aires o el DF, donde hay más cultura de ir a ver bandas siempre. No sé hasta qué punto, pero en realidad las cosas funcionan casi de la misma forma, sobre todo en una fecha que tuvimos en Monterrey que se parecía mucho a los festivales que hacen mis amigos acá en Santiago, como algo muy al aguante.
-En México hay como un interés con lo chileno además.
¡Sí, es real! Parecería que es un mito, pero es real. Les gusta mucho la música de acá y tienen una sensibilidad súper grande, son muy entusiastas. Es genial la gente allá, y tampoco es un nicho de gente super melómana, sino que es como el común de los mortales que es muy cariñosa, y eso es beneficioso para los artistas de acá, porque viajas y ya tienes un marco de público.
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Fotografía por Andrés Moncada.
Aunque tardaron un poco más de lo presupuestado, en agosto Niños del Cerro lanzaron Lance, un trabajo de canciones más complejas y de mayor desarrollo a nivel de arreglos que lo hecho anteriormente, con un sonido que órbita entre el dream pop, shoegaze y el noise. Aunque parece ser menos radial que su antecesor, muchos se han acercado a la banda con estas canciones, además de ser muy bien recibido por los medios especializados.
“Nos llevamos bien y ahora con la gira nos hicimos hasta más amigos, ya somos como hermanos”, dice Simón Campusano.
“Nosotros no somos una banda conocida. Con el Nonato Coo (2015) la banda tuvo cierta repercusión dentro del nicho o un poquito más allá, pero tampoco tanto, sobre todo en México. Allá empezamos a probar el setlist y nos dimos cuenta que sabían todos los temas de Lance y los del Nonato Coo no pegaban mucho, entonces tocamos puras del disco nuevo”
-¿A qué crees que se debe este fenómeno?
No sé si eso es por Quemasucabeza, Internet, Spotify, el sonido. Creo que estéticamente hay mucha cosas que pueden llevar para allá, pero que por razones más de cómo funciona el mundo no llegan, y ahí tiene que ver Spotify, las listas, y cómo la gente escucha música hoy en día, como la facilidad que te entrega eso para conocer música. No creo que tenga tanto que ver con el sonido de la banda, siento que pasa más por razones extramusicales.
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Fotografía por Mila Belén.
-Internet corta las barreras hace un buen tiempo.
Sí. Me acuerdo que lo que más me sorprendió fue cuando un muchacho en Monterrey me dijo que le gustaba mucho Mitimitis, y fue bacán. Ahora lo único que quiero es encontrármelos y decirle que hay un tipo en México que les gusta mucho su música, y es una banda súper under de acá, que a mi me gusta mucho.
-¿Y cómo llegó ese joven a esa música?
Por YouTube, no se si están en Spotify. También me dijo que conoció a Niños del Cerro por un video del Profesor Rayado… Es chistoso los fenómenos que se generan. Yo feliz que sea así.
Para cerrar este año, Niños del Cerro realizará el lanzamiento oficial de Lance en el teatro de Matucana 100 (entradas vía M100.cl), oportunidad en la que además estarán acompañados de músicos invitados y visuales especiales, en un show que promete superar las dos horas.
Tras esto, se vendrá el recorrido habitual por regiones durante el verano, aunque también esperan encerrarse algunos días para grabar algunas canciones que ya tienen preparadas para editarlas en el 2019.
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“Sería un EP de transición, porque no sé que música nueva hacer para la banda y eso es lo que más me entusiasma. Como que tengo música para otros proyectos, para un disco solista que lo tengo listo, -no grabado pero tengo todas las canciones-, y para Niños del Cerro particularmente no sé qué música hacer porque Lance me estrujó el cerebro con la banda”, asegura Simón, destacando además que el proceso de composición será mucho más colectivo que en los anteriores discos. “Por mí que cada uno hiciera un tema. Ahora estamos trabajando un tema que empezó a hacer el “Blondi” (Felipe Villarrubia, bajista), que es algo muy raro y nuevo para nosotros”, concluye.
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