Fiestas Patrias es uno de los fines de semana largos más esperadas del año. Se trata de un período de celebración y abundancia culinaria, en el que muchas veces las personas tienden a consumir en exceso carnes rojas, masas y especialmente alcohol.

Aunque se trata de disfrutar, los especialistas aconsejan cuidar el cuerpo para no sólo evitar un aumento de peso, sino también enfermedades cardiovasculares y gástricas debido a la mala alimentación.

“Si se abusa de esto, pueden presentarse enfermedades agudas como gastritis, síndromes diarreicos y pancreatitis”, afirma Carolina Estremadoyro, nutricionista de Clínica Vespucio.

Según Carolina Pantoja, nutricionista de Clínica Biobío, las personas pueden llegar a subir entre cinco a siete kilos durante esta festividad.

“Cambiar de estado nutricional tan rápido podría provocar alzas en el nivel de colesterol y triglicéridos, aumentando el riesgo de un evento cardiovascular o descompensaciones, en el caso de los pacientes diabéticos”, menciona. Asimismo, asegura que “pueden presentarse otras enfermedades estomacales como la gastritis o pancreatitis”.

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¿Cómo evitar las consecuencias?

  • Limitar el consumo de cortes con mucha grasa y preferir carnes blancas.
  • Acompañar las carnes con ensaladas y disminuir o evitar el consumo de carbohidratos.
  • Evitar frituras y alimentos como cecinas y mayonesa.
  • Optar por frutas frescas para el postre.
  • Preferir jugos y bebidas sin azúcar.
  • Moderar el consumo de alcohol.
  • Beber de 6 a 8 vasos de agua al día.
  • Respetar los horarios de comidas.
  • Distribuir las preparaciones típicas en distintos días.

Bernardita Vignola, nutricionista de Clínica Santa María, agrega que, para los más precavidos, la recomendación apunta a realizar actividad física, tomar un buen desayuno y almorzar temprano durante el fin de semana largo.

Comer sano versus comer rico

Hay que tener claro que disfrutar no es necesariamente comer harto”, comenta el doctor Jean Camousseigt, nutriólogo de Clínica Dávila. El especialista asegura que se puede comer sano y rico a la vez, ya que la clave está en las cantidades: “Si vamos a comer empanada, que sea entre una y una y media. Es eso más la ensalada, por ejemplo. O si vamos a hacer el asado, que sea solo el asado, es decir la carne con el acompañamiento y no mezclar el picoteo”, sostiene.

En efecto, para no sufrir las consecuencias de una mala alimentación mientras se celebra con la familia y amigos, es clave la moderación. “Para disfrutar de todas las comidas se recomienda una porción de cada preparación y respetar los horarios de las comidas, lo que ayuda a no consumir grandes porciones de alimentos”, indica Carola Pantoja.

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Cuidado con las intoxicaciones

Son una de las afecciones más comunes durante las Fiestas Patrias, al igual que la intoxicación etílica y la gastroenteritis aguda. Es por esto por lo que las autoridades sanitarias realizan cada año campañas para un consumo responsable junto con intensas fiscalizaciones a carnicerías, restoranes y fondas.

También denominada “enfermedad transmitida por los alimentos”, la intoxicación alimentaria es una patología provocada por comer alimentos contaminados. Las causas más frecuentes son los organismos infecciosos —entre ellos, bacterias, virus y parásitos— o sus toxinas.

El doctor Alfredo Labarca, urgenciólogo de HELP, asegura que “en la mayoría de los casos, se producen cuando las personas tienen mala higiene alimentaria y se contaminan los alimentos, ya sea con gérmenes derivados de un mal lavado de manos, por el no uso de agua potable, al romper la cadena de frío o por dejarlos fuera del refrigerador por mucho tiempo, en el caso de la mayonesa, leche, cremas o postres”.

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Al respecto, el especialista entrega las siguientes recomendaciones:

  • Consumir alimentos tratados higiénicamente. Por ejemplo, nunca beber leche cruda.
  • Mantener las carnes y pescados siempre refrigerados o congelados.
  • Consumir los mariscos únicamente si están cocidos.
  • Ingerir conservas en perfecto estado.
  • Consumir huevos frescos y limpios.
  • Comer frutas y verduras frescas y sin mohos, tratarlas con unas gotas de cloro durante 10 a 15 minutos, enjuagarlas abundantemente y mantenerlas a una temperatura de 7 a 9°C.
  • Evitar la contaminación cruzada, separando las áreas de preparación de los alimentos crudos y cocidos.
  • Cocinar los alimentos correctamente, asegurándose que ha llegado a 70°C al centro; es aconsejable cocinar con mucha antelación.
  • Conservar los alimentos congelados a -18°C, descongelar en el refrigerador o microondas (nunca descongele dejando la comida al aire libre).
  • Mantener una correcta higiene personal, así como también de las superficies de la cocina y los utensilios. Lavarse muy bien las manos constantemente.
  • Utilizar agua potable en las preparaciones y para beber; de lo contrario usar agua hervida.
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