Con la llegada del otoño, las temperaturas se vuelven cada vez más frías y con ello el invierno está a la vuelta de la esquina. Uno de los cambios en la nueva estación del año es sin duda la modificación del horario.

Ya solo quedan un par de semanas para disfrutar de tardes más iluminadas por el sol. El gobierno confirmó que el próximo sábado 4 de abril, casi todos los relojes en Chile, deberán ser retrasados en una hora.

Esto quedó regido en el Decreto Supremo N°1286, donde se indica la modificación del huso horario UTC-4, estipulando que solo la región de Magallanes y de la Antártica Chilena deberán mantener el denominado “horario de verano”.

Serán cinco meses que se mantendrá la modificación, haciendo que las tardes se han más cortas en cuanto a la luz solar se refiere.

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El ministro de Energía, Juan Carlos Jobet, indicó que el decreto no debe sufrir modificaciones por la pandemia de COVID-19 que afecta al país.

Incluso, el secretario de Estado reconoció que la modificación al horario de verano va ser beneficioso ya que los ciudadanos regresaran a sus hogares más temprano.

“Dada la contingencia del COVID-19, más luz en la mañana ayudará a quienes están realizando actividades muy valiosas fuera de casa en momentos como estos”, sindicó Jobet al diario El Mercurio.

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