La Fundación InterAmericana del Corazón premió al senador Guido Girardi con el galardón “Ciencia de la Paz” por su rol en la promulgación Ley de Etiquetado y políticas para el control del tabaco.
La organización resaltó a Girardi por el “papel crucial que jugó en la promulgación de la Ley de Etiquetado frontal de alimentos procesados y de varias políticas para el control del tabaco en Chile”.
“Usted ha protegido la salud de millones de personas con su valentía y coraje, frecuentemente respondiendo a intereses comerciales que buscaban obstaculizar estas políticas efectivas que contribuyen a la mejor salud de los chilenos“, indicaron en la carta donde la fundación anunció la distinción.
En la misiva también aseguran que “Chile se ha convertido en un país líder no solo en la región, pero en el mundo con políticas efectivas que mejoran la calidad de vida de poblaciones enteras”.
Para el senador este reconocimiento “es un gran incentivo para seguir trabajando ya no sólo por los chilenos sino que por la salud mundial (…) Que una ley que uno hace en tu país, adquiera un carácter global y que está siendo tomada como el principal modelo de trabajo a nivel mundial, me llena de orgullo en lo personal, pero también por el mundo científico con el que trabajé y el apoyo de las organizaciones ciudadanas”.
“Muestra que Chile puede generar contenidos que trascienden y que se exportan a todo el mundo“, agregó.
Una ley controversial
La Ley de Etiquetado comenzó a regir en junio de 2016, y junto con ella la normativa que cada producto empaquetado debe tener un sello advirtiendo si poseen alto contenido en grasas, calorías, azúcares o sales, pero desde el inicio de su discusión en 2007 recibió un fuerte rechazo de la industria alimentaria.
A pesar de que lleva varios años funcionando, hasta el día de hoy sigue la disputa por la eficacia de la ley en ayudar a cambiar los hábitos alimenticios de los consumidores chilenos.
Rodrigo Álvarez, presidente de AB Chile (Alimentos y Bebidas de Chile) señaló en una columna publicada en un diario nacional que “a dos años aún no conocemos ninguna evaluación que nos permita saber con claridad si este camino que nuestro país se trazó nos está llevando realmente a la meta. La industria de alimentos ha sido enfática y transparente al plantear su discrepancia con algunos de los criterios técnicos que se adoptaron en el reglamento“.
No obstante, Girardi puntualizó que “esta ley es muy importante porque demuestra a los otros países, parlamentarios y ministerios de salud del mundo que se puede hacer una ley contra los intereses de las grandes empresas transnacionales (…) Si hay alianza entre el mundo científico, académico y parlamentario se pueden generar leyes aún cuando tengan todos los poderes económicos de las grandes transnacionales de comida chatarra”.
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