La mañana de este martes, el secretario general de la Conferencia Episcopal, Fernando Ramos, se refirió al escenario de la Iglesia ante las nuevas denuncias por agresiones sexuales que surgieron durante este lunes, en específico contra el sacerdote Tito Rivera al interior de la catedral de Santiago.
Ramos señaló que “todos sabemos lo difícil que ha sido nuestra situación en Chile” y señaló que, tras el encuentro sobre abusos que se desarrolló en el Vaticano en febrero pasado, desde la Iglesia reafirman su compromiso “para que estas situaciones no se vuelvan a repetir y tratar de enfrentarlas con el mayor rigor posible”.
“Una dificultad que hemos tenido es saber acompañar a las víctimas, quizás no lo hemos sabido hacer bien y tenemos que seguir trabajando en ese camino”, agregó.
Del mismo modo, Ramos aseguró que desde la institución están trabajando para firmar un convenio para prestar colaboración a la justicia de mejor forma.
Por otra parte, declinó de referirse en específico a las denuncias en contra de Tito Rivera -a quien se acusa de violación contra un hombre de 42 años y abusos sexuales contra acólitos- y Ricardo Ezzati -por encubrimiento-, y señaló que “serán los tribunales los que tendrán que decidir al respecto”.
Además, agregó que para dicho caso en particular prefiere que sea la catedral de Santiago la que se manifieste.
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