Varios han sido los días de tensión entre el Gobierno y el Partido Socialista (PS), tras los dichos de la ministra vocera de Gobierno, Cecilia Pérez, sobre el supuesto vínculo entre el narcotráfico chileno y el PS.
Las polémicas declaraciones ocurrieron el 19 de agosto y de ahí en adelante, varias han sido las reacciones y medidas, no solo contra la ministra y el llamado a retractarse de sus dichos, sino también el bloqueo legislativo.
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En entrevista con El Mercurio, la secretaria de Estado volvió a referirse a sus dichos en agosto y sostuvo que “no creemos que el PS ni su militancia tengan un vínculo institucional con el narcotráfico; sin perjuicio de que los hechos de San Ramón son muy graves” y agregó que los hechos deben ser esclarecidos.
“Lo que señalé nunca ha tenido relación con implicar al PS como institución, o a todos sus militantes, en la eventual vinculación con el narcotráfico”, señaló Pérez.
“En el PS se pueden molestar, criticar, presentar denuncias, pero no pueden cerrar las puertas del Congreso”, dijo la ministra y agregó que “la calidad de vida de los chilenos no puede verse dañada porque a un partido no le gustó una declaración”.
En cuanto al bloqueo legislativo, la vocera de Gobierno espera que “prime la racionalidad”.
Recordemos que la última encuesta Plaza Pública-Cadem, que, entre sus mediciones, consideró el impacto de las declaraciones realizadas por la ministra secretaria general de Gobierno, indicó que la aprobación de la vocera cayó siete puntos, pasando de un 52% al 45%.
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En aquella ocasión, Pérez señaló que desde el gobierno “trabajamos por convicciones que apuntan a fortalecer la democracia y también la transparencia, por eso trabajamos y no por las encuestas”, afirmó.
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