Un verdadero dolor de cabeza ha significado, tanto para las comunidades indígenas como para la inmobiliaria Cumbres Alto Calama SPA, un proyecto ubicado en la zona oriente de la ciudad, a sólo metros de un cementerio indígena declarado patrimonio arqueológico de la nación por el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN).

Se trata del cementerio Topater, que tiene más de 2.500 años de antigüedad y es un lugar de culto para las comunidades aymara, quechua y lickanantay, originarias de esa zona.

Son estas culturas, representadas por el consejo “Ayllús sin Fronteras”, las que advierten que este proyecto inmobiliario amenaza ese patrimonio arqueológico y cultural.

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La Superintendencia de Medio Ambiente recibió una denuncia y confirmó que a raíz de ella inició un requerimiento de ingresó al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) contra la empresa responsable, Inversiones Cumbres Alto Calama SPA.

El conflicto de las comunidades con la empresa data de hace años. En 2013, la Corte Suprema paralizó las obras argumentando que la empresa no realizó la consulta indígena ni el estudio de impacto ambiental que correspondía. Una medida que mantuvo todo en suspenso hasta que en 2016 el Consejo Nacional de Monumentos dejó sin efecto la paralización de los trabajos, al considerar que en el sector específico donde se construirá el proyecto no hay restos arqueológicos. Estos están a unos 30 metros de distancia.

En enero de este año se retomaron los trabajos, pero las comunidades nuevamente arremetieron contra el proyecto.

Alegan que abarca una superficie de 11,3 hectáreas y que se realiza en una zona saturada por contaminación de material particulado, lo que lo vuelve inviable. Esta denuncia derivó en una fiscalización del Servicio de Medio Ambiente (SMA) local, que resolvió paralizar las obras.

“Esto porque la empresa está realizando una urbanización mayor a 7 hectáreas en una zona declarada saturada”, afirmó Sandra Cortez, jefa de Oficina Regional SMA Antofagasta.

De hecho, tras la fiscalización realizada por esta oficina de la SMA, se informa formalmente que: “se constató que se estaban realizando obras de urbanización dentro del sector “Lote A-2″ con movimientos de tierra y maquinaria pesada, y que la superficie donde está emplazado dicho proyecto es superior a las 7 hectáreas (h), cubriendo aproximadamente 13,4 (h) y que dicho proyecto se encontraba emplazado dentro de la zona declarada como saturada por material particulado.”

El organismo entregó un plazo de 15 días para que la compañía presente los antecedentes. Una respuesta que, de acuerdo a los aludidos, darán las próximas horas.

“No es que se nos acuse, es que no saben si aplica o no aplica este ingreso al SEIA. Nosotros tenemos los planes de manejo y trabajamos con la comunidad del sector”, aseguró que Raúl Alfaro, gerente de Inversiones Cumbres Alto Calama SPA.

La empresa insiste en que se trata de un proyecto de urbanización menor a 6 hectáreas y que cuentan con todos los permisos correspondientes y que por lo mismo no está paralizado. Este proyecto significa urbanizar la zona, poner luz y alcantarillado para luego venderlos a terceros, quienes verán que uso le darán al terreno comprado.

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Por su parte, la agrupación “Ayllus sin Fronteras” declara que pese a que no sería específicamente en el cementerio Topater, las obras sí afectarían al patrimonio del lugar.

“Para el mundo indígena todo está conectado. Si intervienes un lugar estás afectando al otro igual. Hay muchos vestigios arqueológicos que no tienen estudios acabados”, manifestó Eduardo Choque, vocero de la agrupación.

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Para Carolina Agüero, antropóloga y académica de la Universidad Católica del Norte, es un lugar que merece ser preservado.

“Es uno de los pocos sitios formativos que hay en Calama junto a Chorrillos. Entiendo que la comunidad quiera mantenerlo como cementerio de sus ancestros aunque la mayoría de las tumbas ha sido excavada”, señaló.

La agrupación aseguró que esperan que este sector pueda ser declarado un Bien Nacional Protegido (BNP) y que en caso de no tener respuesta positiva respecto a esta solicitud llegarán a instituciones internacionales.

Mira acá el inicio al requerimiento de ingreso al Sistema de Evaluación Ambiental:

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