La delegación ucraniana recibió instrucciones de irse de la casa presidencial. Un funcionario de la Casa Blanca señaló que los ucranianos protestaron y querían continuar las conversaciones, pero se les dijo que no.
(CNN) – El presidente Donald Trump y el presidente Volodymyr Zelensky fueron a habitaciones separadas después de su acalorado intercambio en la Oficina Oval, y los ucranianos querían que las conversaciones continuaran.
Sin embargo, la Casa Blanca dejó claro que era hora de que se fueran.
El mandatario estadounidense ordenó que se les dijera a los ucranianos que se fueran, según comentó un funcionario de la Casa Blanca.
Trump consultó al vicepresidente JD Vance, al secretario de Estado Marco Rubio, al secretario del Tesoro Scott Bessent y a sus otros asesores principales después del dramático enfrentamiento en el que Trump y Vance acusaron a Zelensky de ser desagradecido por la ayuda estadounidense, señaló un funcionario de la Casa Blanca.
Fue entonces cuando Trump finalmente decidió que el ucraniano “no estaba en condiciones de negociar”. Le ordenó a Rubio y a su asesor de seguridad nacional, Mike Waltz, que transmitieran el mensaje: era hora de que Zelensky se fuera.
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Los ucranianos se encontraban en una sala separada, como es habitual cuando un líder extranjero visita el país. Normalmente, van a otras salas y luego se reúnen para almorzar. Pero los ucranianos no cenarían en la Casa Blanca. Mientras la comida preparada estaba en carritos en un pasillo fuera de la oficina del secretario de prensa, los ucranianos recibieron instrucciones de irse.
El funcionario de la Casa Blanca señaló que los ucranianos protestaron y querían continuar las conversaciones, pero se les dijo que no.
Zelensky se marchó poco después.
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