El próximo 2 de febrero se conocerá la sentencia por el crimen de Lucio Dupuy, el niño de 5 años que fue abusado sexualmente y asesinado a golpes en Argentina por su madre, Magdalena Espósito Valenti, y su pareja, Abigail Páez.
Tras las audiencias de testigos y los alegatos finales de las partes, tres jueces del Tribunal de Audiencias de Santa Rosa serán los encargados de dictar la sentencia por el brutal crimen que ha causado indignación en el país vecino.
¿Qué pasó?
Lucio Dupuy murió tras una golpiza propinada por ambas mujeres en noviembre de 2021. El menor habría sufrido una serie de abusos durante dos años, incluido el abuso sexual, según constataron las pericias posteriores a su fallecimiento.
Las investigaciones de la Fiscalía argentina determinaron que para Espósito Valenti y Páez, el pequeño Lucio era una “molestia” en su relación.
El Ministerio Público pidió prisión perpetua para la madre del menor por el delito de “homicidio calificado y abuso sexual gravemente ultrajante”. En el caso de Páez, se está pidiendo la misma pena, pero sin el agravante vincular con la víctima.
Además, se introdujo una querella por “odio de género”. En su informe, los fiscales Verónica Ferrero, Walter Martos y Marcos Sacco señalan que “a raíz de las lesiones en la parte genital del niño, se determina la existencia de un crimen por odio por las características de Lucio perteneciente al género masculino”.
Las defensas de las acusadas han planteado la hipótesis de un hecho “preterintencional”, alegando que las agresoras no tuvieron la intención de dar muerte al menor.
El día de su muerte, Lucio Dupuy fue llevado al Hospital Evita de Santa Rosa con múltiples lesiones, quemaduras y mordiscos, además de una “hemorragia interna” de la que no pudo ser reanimado. Posteriormente, se supo que el niño había sido atendido por traumatismos varias veces entre diciembre de 2020 y marzo de 2021, sin embargo, no existió un seguimiento de esos antecedentes.
Cuando presentó su informe, el médico forense Juan Carlos Toulouse sostuvo que “en mis casi 30 años de profesión nunca vi algo así”.
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