VIDEO RELACIONADO - José Miguel Vivanco, ex Dir. HRW, sobre posible juicio a Putin (11:07)
{"multiple":false,"video":{"key":"b4CN1uwjAx","duration":"00:11:07","type":"video","download":""}}

(CNN) – Después de semanas de no lograr dividir a Europa con la guerra en Ucrania, Vladimir Putin disfrutó de dos pequeñas victorias diplomáticas este fin de semana, ya que, tanto en Hungría como en Serbia, los partidos abiertamente prorrusos ganaron cómodamente las elecciones legislativas, dándole a Putin un espaldarazo y mensaje de que, a pesar de la respuesta firme y en gran parte unida de la comunidad internacional a la invasión, sigue teniendo algunos amigos en Occidente.

La elección más significativa se produjo cuando el primer ministro húngaro, Viktor Orban, y su partido nacionalista Fidesz obtuvieron una victoria aplastante. Cabe recordar que Hungría es miembro tanto de la Unión Europea (UE) como de la OTAN, lo que significa que Putin puede afirmar que tiene un amigo con asientos en la mesa principal de dos de las instituciones con las que registra más conflicto.

El pasado domingo, durante su discurso de victoria, Orban incitó no solo a la UE sino también a Ucrania: “Tenemos una victoria tal que se puede ver desde la Luna, pero seguro que se puede ver desde Bruselas”, dijo, y agregó que Fidesz “recordará esta victoria hasta el final de nuestras vidas, porque tuvimos que luchar contra una gran cantidad de oponentes”. Efectivamente, incluidos en esa lista de opositores estaban los burócratas de Bruselas, los medios internacionales y, deliberadamente, el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky.

Zelensky ha criticado directamente a Orban por no apoyar a Ucrania con el mismo entusiasmo que muchos de sus homólogos europeos en las últimas semanas. Putin se apresuró a felicitar a Orban por su victoria. Sin embargo, pocos creen que la victoria hará algo para afectar la resolución de la UE sobre Ucrania.

Lee también: Bachelet expresa su preocupación tras matanza en Bucha: Pidió investigaciones independientes para “garantizar la paz y justicia”

De cualquier manera, Orban ha estado de acuerdo con las sanciones de la UE contra Rusia y ha estado en gran medida en línea con el resto de la alianza occidental. El principal bloqueo de Hungría en términos de apoyo a Ucrania ha sido la renuencia de Orban a permitir que las armas fluyan a través de su país para apoyar a las tropas ucranianas.

El país también es el principal obstáculo en las conversaciones de la UE sobre la prohibición de las importaciones de energía de Rusia. Alemania dijo durante el fin de semana que el bloque necesitaba discutir la prohibición del gas ruso después de los informes de crímenes de guerra cometidos en Ucrania, medida que Orban ha descartado repetidamente.

La obstinación de Hungría ha molestado a su aliado clave, Polonia, otro gran infractor del estado de derecho en Europa, que ha utilizado sus poderes de veto para proteger a Orban de los castigos de la UE en numerosas ocasiones en los últimos años. No está claro si Polonia lo seguirá haciendo tras el fin de la guerra.

Los analistas han destacado que Hungría se ha alejado mucho de los valores de la UE sobre el estado de derecho y los derechos humanos, reprimiendo las instituciones culturales y suprimiendo la libertad de prensa. No obstante, la mayoría de los intentos de castigar a Hungría a través del organismo europeo han fracasado, sobre todo porque una acción significativa requeriría que todos los estados miembros de la UE estuvieran de acuerdo en una votación.

Lee también: HRW advierte que lo que ocurrido en Bucha “podría replicarse a gran escala”

Polonia y Hungría han tenido recientemente una especie de pacto. Efectivamente, ambas naciones han ejercido sus vetos en la UE para protegerse mutuamente. Sin embargo, podría decirse que Polonia es el mayor representante anti-Rusia en la UE y hasta ahora no está claro cómo afectará esto en la relación una vez que termine la guerra. Desde el comienzo de la guerra, los funcionarios de la UE han estado hablando discretamente de ofrecer acuerdos a Polonia para que se acerque más al resto del bloque.

La situación es muy diferente en Serbia, ya que no es miembro de la UE ni de la OTAN, aunque actualmente está pasando por el proceso de unirse al organismo europeo y se espera que las negociaciones finalicen en los próximos dos años. En dicho contexto, el presidente de Serbia, Aleksandar Vučić, se ha visto en una posición difícil por la invasión rusa de Ucrania. Durante años, ha tratado de equilibrar el mantenimiento de fuertes lazos diplomáticos y económicos con Rusia, y una especial estimación hacia Putin, con el abrazo occidental que vendría junto a la membresía plena en la UE.

Durante su campaña electoral, Vučić no se desvió de este equilibrio y se postuló desde una postura de paz y estabilidad en la región, según informó Reuters. Serbia depende casi por completo del gas ruso, a la vez que sus ejércitos mantienen vínculos. Aunque Serbia respaldó dos resoluciones de las Naciones Unidas que condenan la invasión rusa de Ucrania, se negó a imponer sanciones contra Moscú. Por su parte, el Kremlin también apoya la oposición serbia a la independencia de Kosovo, bloqueando su membresía en las Naciones Unidas.

Tags:

Deja tu comentario