El fundador de Huawei se muestra desafiante frente a los intentos estadounidenses de frenar el alcance internacional del gigante tecnológico chino y enjuiciar a su hija.

“No hay manera de que Estados Unidos nos aplaste”, dijo Ren Zhengfei en una entrevista con la BBC que se emitió el martes. “El mundo necesita a Huawei porque estamos más avanzados”.

Huawei, el fabricante de equipos de telecomunicaciones más grande del mundo, está luchando contra una campaña liderada por Estados Unidos para persuadir a los aliados estadounidenses a que impidan que la tecnología de la compañía lleguen a las redes superrápidas 5G.

Australia y Nueva Zelanda ya han restringido a los operadores de telefonía móvil el uso de equipos Huawei para 5G. El Reino Unido, Alemania y otros están considerando la posibilidad de tomar medidas drásticas también.

El gobierno de Estados Unidos argumenta que los productos de Huawei podrían ser explotados por los servicios de inteligencia chinos para espionaje, una acusación que la compañía ha negado reiteradamente.

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Los fiscales de Estados Unidos también han acusado formalmente a Huawei y a su directora financiero, Meng Wanzhou, por cargos de fraude bancario y evasión de sanciones. Meng, una de las dos hijas de Ren, fue arrestada en Canadá en diciembre y enfrenta una posible extradición a los Estados Unidos.

La ofensiva estadounidense contra Huawei ha tensado las relaciones entre Washington y Beijing, y amenaza con interrumpir el despliegue de las redes 5G en todo el mundo.

“Debemos proteger nuestra infraestructura crítica de telecomunicaciones y Estados Unidos llama a todos nuestros socios de seguridad a que vigilen y rechacen cualquier empresa que comprometa la integridad de nuestra tecnología de comunicaciones o nuestros sistemas de seguridad nacional”, dijo el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, el sábado en la Conferencia de Seguridad de Munich.

‘Estados Unidos no representa al mundo’

Ren, de 74 años, fundó Huawei hace 32 años después de servir en el ejército chino como ingeniero y trabajar en la industria petrolera. Hijo de maestros de escuelas rurales en las montañas de la provincia de Guizhou, ha convertido su empresa en un gigante mundial con ingresos anuales de más de 100.000 millones de dólares.

Ren, quien conserva el título de presidente ejecutivo, le dijo a la BBC que incluso si Estados Unidos convenciera a más países para que dejen de usar equipos Huawei, la compañía “podría suavizar un poco las cosas”.

“Si las luces se apagan en el oeste, el este todavía brillará”, dijo. “Y si el norte se apaga, entonces todavía está el Sur. Estados Unidos no representa al mundo”.

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Analistas concuerdan en que el vasto negocio global de Huawei, fuerte en muchos mercados emergentes, podría sobrevivir incluso si el gobierno de EE.UU. persuade a más de sus aliados de excluir los productos de la compañía de las redes 5G. La compañía es ampliamente vista superando a sus principales rivales en la tecnología 5G, por lo que es casi insustituible para algunas transmisiones inalámbricas.

Huawei también es uno de los principales fabricantes de teléfonos inteligentes y pretende superar a Samsung como la mayor empresa del mundo en este rubro para el próximo año.

Pero aún es vulnerable. Los analistas dicen que la administración Trump podría usar la acusación reciente de Huawei para prohibirle comprar componentes vitales de compañías estadounidenses. Eso casi seguramente hundiría a Huawei en una crisis similar a la sufrida por su rival chino ZTE , que estuvo paralizada durante meses por una prohibición similar el año pasado.

Huawei y Meng niegan los cargos presentados contra ellos el mes pasado por fiscales estadounidenses.

Ren le dijo a la BBC que objeta la solicitud de extradición de su hija por parte de los EE.UU. por considerar que tiene “motivación política“.

“Pensaron que si la detenían Huawei se derrumbaría, pero no nos derrumbamos”, dijo. “Todavía seguimos avanzando”.

En comentarios a los medios el mes pasado, Ren dijo que extraña mucho a Meng pero también dio una descripción ambivalente de su relación. “Es una relación estrecha en algunos aspectos y no tan estrecha en otros”, dijo.

“Durante su niñez, yo estaba en el ejército, lo que significa que cada año estaba ausente durante 11 meses, pasando un mes con mi familia”, dijo. “Nuestra conexión durante su niñez y adolescencia no fue tan fuerte”.

En años posteriores, dijo, luchaba por la supervivencia de Huawei, y trabajaba regularmente 16 horas al día. Admitió que no está cerca de ninguno de sus tres hijos, pero se siente en deuda con ellos.

‘Todavía confiamos en el Reino Unido’

El gobierno chino ha defendido vigorosamente a Huawei ya que ha estado bajo la creciente presión de Estados Unidos y exigió la liberación inmediata de Meng. La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Hua Chunying, dijo el lunes que los comentarios de Pence en Munich eran “hipócritas, inmorales, injustos e intimidatorios”.

Reiteró las críticas de Beijing de que el gobierno de EE.UU. pretende “tomar medidas enérgicas contra los legítimos derechos e intereses de las empresas chinas, inventar mentiras e intervenir en actividades económicas por medios políticos”.

Un posible quiebre surgió esta semana en la alianza que Estados Unidos intenta construir contra Huawei.

Los servicios de inteligencia del Reino Unido han concluido que hay formas de limitar los riesgos de utilizar equipos Huawei para construir redes 5G, según un informe del Financial Times. El gobierno del Reino Unido, que es miembro de una alianza clave de inteligencia compartida con Estados Unidos, dijo en respuesta al informe que espera completar su revisión de seguridad de la tecnología de red 5G en los primeros meses del año, pero que aún no se ha llegado a una decisión.

Huawei ya está prácticamente excluida del mercado estadounidense de equipos de telecomunicaciones, y Ren le dijo a la BBC que si el gobierno estadounidense continúa oponiéndose a la inversión de la compañía, simplemente moverá más negocios al Reino Unido.

“Continuaremos invirtiendo en el Reino Unido”, dijo. “Todavía confiamos en el Reino Unido, y esperamos que el Reino Unido confíe aún más en nosotros”.

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