(CNN) – La Casa Blanca convocó al embajador de China en Estados Unidos, Qin Gang, para condenar las actividades militares “irresponsables” de Beijing cerca de Taiwán, mientras las tensiones continúan aumentando en la región tras la visita de Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes, a la isla esta semana.
“Después de las acciones de China durante la noche, convocamos al embajador de la República Popular China, Qin Gang, a la Casa Blanca por las acciones provocativas de la República Popular China. Condenamos las acciones militares de la República Popular China, que son irresponsables, contrarias a nuestro objetivo de larga data de mantener la paz y la estabilidad a lo largo del Estrecho de Taiwán”, dijo John Kirby, coordinador de comunicaciones estratégicas del Consejo de Seguridad Nacional, en un comunicado a CNN.
La decisión de convocar a Qin ocurre luego de varios días de reiteradas advertencias a China para que no aumentara las tensiones en la región tras la visita de Pelosi a la isla autónoma. Justamente, el Partido Comunista de China considera a Taiwán como parte de su territorio, a pesar de que nunca la ha controlado. Y la movida también representa un cambio de actitud en la Casa Blanca sobre el viaje, pues antes de que ocurriera, varios funcionarios intentaron advertir a Pelosi en privado sobre las posibles consecuencias de la visita y cómo podría dañar las relaciones entre Estados Unidos y China. La reunión con el embajador la reportó inicialmente The Washington Post.
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China toma acciones
Durante los días posteriores al viaje de Pelosi a Taiwán, China ha tomado múltiples medidas bélicas, tanto en el ámbito diplomático como militar.
En el frente diplomático, Beijing sancionó a Pelosi y su familia inmediata. Además, anunció este viernes que suspendería la cooperación con Washington en varios temas, incluida la lucha contra la crisis climática. El Ministerio de Defensa de Taiwán dijo que buques de guerra y aviones chinos realizaron ejercicios en aguas alrededor de la isla y que las fuerzas chinas cruzaron la línea media, el punto medio entre la isla y China continental. Un movimiento que las autoridades calificaron de un “acto altamente provocativo“.
Dos drones chinos también volaron cerca de Japón este jueves, lo que llevó a la Fuerza Aérea de Autodefensa del país a enviar aviones de combate como respuesta, según un comunicado del Ministerio de Defensa de Tokio.
EE.UU. le dice al embajador que no quiere una crisis
Según Kirby, la Casa Blanca le dijo a Qin que EE.UU. no quiere una crisis en la región y le reiteró que no ha habido cambios en la política del país respecto a “Una sola China“. También que Washington reconoce a la República Popular China como el único gobierno legítimo.
“También dejamos claro que Estados Unidos está preparado para lo que Beijing decida hacer. No buscaremos ni queremos una crisis. Al mismo tiempo, no seremos disuadidos de operar en los mares y cielos del Pacífico occidental, de conformidad con el derecho internacional, como lo hemos hecho durante décadas, apoyando a Taiwán y defendiendo un Indo-Pacífico libre y abierto”, dijo Kirby en el comunicado.
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El coordinador del Consejo de Seguridad Nacional para asuntos del Indo-Pacífico, Kurt Campbell, se reunió con Qin, según una fuente familiarizada con el asunto. Kirby dijo el jueves que China está exagerando y utilizando la visita de Pelosi a Taiwán “como pretexto para aumentar la actividad militar provocativa en el Estrecho de Taiwán y sus alrededores”. Y añadió que la Casa Blanca espera más acciones provocativas “en los próximos días”.
“Dicen que es una protesta”, indicó Kirby. “Lo entiendo. Pero también es un pretexto para tratar de subir la apuesta en las tensiones y tratar de establecer un nuevo statu quo para llegar a una nueva normalidad en la que creen que pueden mantener las cosas”.
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