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La minería fue por siglos un trabajo exclusivo de los hombres. Hace solo 25 años aún existía en Chile una ley del Código del Trabajo que impedía a las mujeres ingresar a los yacimientos.

Este tipo de normativas se unía a la creencia popular de que ellas traían “mala suerte” para el pique. “Existía el pensamiento de que, si entrabamos a la mina, significaba desgracia. Pero hoy podemos hacer los mismo que los hombres”, manifestó Cristina Ledezma.

Cristina ha demostrado durante los últimos 13 años sus capacidades y talentos. Ella se convirtió en la primera mujer palera en Minera Escondida de BHP Billiton, trabajo que logró gracias a la oportunidad y capacitación que le entregaron.

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Vengo de una familia camionera, todo empezó con un aviso en el diario, postularon 1200 mujeres (…) El primer día me subí a la máquina y vi muchos controles, pero luego dije ‘no me la iba a ganar’”, afirmó.

Según un estudio del Consejo Minero sobre la Fuerza Laboral en la Minería, la integración de las mujeres ha ido en alza durante los últimos tres años, subiendo de un 9 a 12,2%. Esto habla de aproximadamente 24.500 mujeres de 200 mil trabajadores directos, en un rango de 700 mil personas en total.

Sin embargo, sólo se logrará una real integración si las mineras del país toman medidas acordes a las necesidades de cada mujer. Dominique Gómez tiene 35 años y hace una década es jefa de turno en el proceso de extracción de la mina El Teniente de Codelco, pero también es mamá de Macarena.

“Yo he tenido la suerte de que en realidad cada vez que lo he necesitado, lo hemos conversado. Mi turno da la posibilidad de estar presente en sus actividades, cuando mi hija tiene presentaciones”, manifestó Dominique a Minería 360.

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Las mineras se han comprometido con la Norma 3262 del Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género, para crear un sistema de igualdad y conciliación en el trabajo. En el caso de El Teniente, se han implementado medidas para asegurar la flexibilidad de los horarios.

La división Gabriela Mistral, ubicada a 120 km de Calama, fue la primera en incorporar esta norma y en llegar al 23% de la integración de mujeres en la fuerza laboral.

En la última década ha aumentado en un 50% la incorporación de mujeres en la minería chilena, pero el objetivo no es solo atraerlas a este rubro, sino que puedan permanecer y progresar profesionalmente.

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