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Son tanto públicas como privadas las instancias que están haciendo esfuerzos para tratar de mitigar la crisis generada por la pandemia del nuevo coronavirus. Primero fueron los bancos, hacia los cuales se anunciaron las medidas gubernamentales que buscan contener el efecto que inevitablemente tendrá en la economía.

Para conocer cómo pudiera impactar a las pymes esta crisis sanitaria mundial, Matilde Burgos conversó con Juan Pablo Swett, presidente de la Multigremial Nacional de Emprendedores y ex presidente de la CPC.

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La pandemia del coronavirus se produce en un momento en el que Chile viene de cinco meses difíciles, especialmente para las pymes. Por lo tanto, esta nueva contingencia la sorprende muy debilitadas.

Nosotros vemos que la complicación puede venir en cuánto dure esto. Estamos recién en otoño, estamos entrando en los meses de invierno y todos los esfuerzos están haciendo para parar los contagios en los meses de abril y mayo, probablemente, ahí aplanar las curvas”, dice.

Swett explicó que el paquete de medidas anunciado por el gobierno alcanza para 60 o 90 días, como máximo. Eso significa que se podría apoyar al mundo de las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) en abril, mayo, junio. Pero si esto se extiende y se producen nuevos brotes en los meses de invierno más duros, la crisis podría llegar a octubre y, en ese escenario, la situación de las Mipymes se puede complicar mucho, advirtió el dirigente gremial.

Nosotros estimamos que entre 100 mil y 150 mil micro, pequeñas y medianas empresas podrían estar quebrando, eso es el 15% del mundo de las Mipymes y eso le podría costar al país cerca de un millón de puestos de trabajo, con lo que veríamos, lamentablemente, aumentado el desempleo a tasas del 17% o 18%”.

Sobre las medidas anunciadas por el gobierno de Sebastián Piñera, considera que “van en la línea correcta”, igualmente, estima que el sector bancario está actuando de forma adecuada.

A los bancos, efectivamente, la crisis no les afecta mucho, pero sí se están comportando bien. Han recogido el llamado que hemos hecho desde el mundo de las pymes de poder tener periodos de gracias. Ya son seis bancos los que han salido con posibilidades -no solamente para las pymes, también para todos los chilenos- en créditos de consumos e hipotecarios. Están reaccionando”, comentó.

Sin embargo, considera que hace falta la reacción de otros sectores.

“Hay otro actor importante que no hemos visto que salga con fuerza que son las grandes empresas. Está el presidente de la Sofofa y de la CPC, que también deberían hacer un llamado importante a las 15 mil grandes y megas empresas que hay en Chile que concentran el 85% de las ventas del país y que ellos pueden hacer un llamado a pagar al contado, a pagar a 30 días, a mantener ciertos niveles de actividad”.

Ante este panorama, hay que tener en cuenta que se trata de una carrera contrarreloj, pues el sector de comercio y servicios no puede esperar, especialmente, porque vienen de una temporada de poca liquidez por el contexto país.

“El problema es que no hay tiempo. Hoy día el sector restaurantes, hotelería, turismo ha visto disminuir sus ventas en un 90%. Ellos van a estar con problemas de liquidez en dos o tres semanas más. Lo que tenemos que hacer ahora es frenar la propagación, porque es un tema sanitario. Si no, yo creo que vamos a tener que estar hablando de un nuevo paquete de medidas por parte del gobierno en los mese de junio y julio, porque la crisis se nos va a extender mucho más allá de lo que teníamos pensado”.

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En cuanto a la cuarentena o aislamiento obligatorio, el ex presidente de la CPC  aboga por un cierre progresivo para minimizar el impacto. “Ir cerrando parceladamente es lo importante. Entendemos y estamos de acuerdo en que va a llegar un minuto en que se va a tener que cerrar todo, más temprano que tarde. Lo importante es que ese cierra tenga efecto y podamos parar el virus, porque si esto se extiende los costos van a ser enorme”, finalizó.

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