Otra dura noticia recibió la industria del calzado nacional, luego que se conociera que Guante-Gacel cerró su fábrica de producción en Santiago.
A través de un comunicado la compañía aseguró que 283 trabajadores ya fueron despedidos, esto debido a la “gran diferencia de costos con productores de otros países”, lo que hizo por décadas difícil fabricar calzado en Chile.
Guante aseguró que fue una “decisión dura por la relación de años con las personas que trabajaban en los procesos de fabricación, sin embargo la realidad no dejó alternativas”.
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El cierre de la fábrica en San Miguel que operó por casi 90 años, se suma al de Albano en Concepción cerrado a fines de 2018 que dejó de funcionar tras 43 años, y al fin luego de 47 años de los emblemáticos Calzados Beba a principios de este año.
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