La desazón del camarín luego de la derrota 4-0 en el clásico universitario es el fiel reflejo del mal momento de la Universidad de Chile. Sólo el técnico Alfredo Arias y el capitán Johnny Herrera sacaron la voz justo horas antes de quedar últimos en la tabla de posiciones.
La victoria de Cobresal sobre la Universidad de Concepción los relegó al fondo de la clasificación del Campeonato Nacional 2019 con apenas cinco puntos de 24 posibles, cuestión que no sucedía desde agosto del 2006.
Bajo la conducción de Gustavo Huerta, los azules comenzaron negativamente el Torneo de Clausura con una unidad de 18 disputadas y derrotas estrepitosas de por medio. Para ser más exactos, cayeron ante Palestino (1-0), Huachipato (2-0), Deportes Puerto Montt (3-0), Deportes La Serena (3-0) e igualaron ante Cobreloa (1-1).
Recién en la séptima fecha cosechó su primera alegría que, paradójicamente, fue sobre Universidad Católica por 1-0 con gol de Luis Pedro Figueroa.
Eso sí, ese año el fútbol chileno se jugaba bajo la modalidad de dos torneos cortos con playoffs, por lo que la situación era menos delicada gracias a los puntos obtenidos en el Torneo de Apertura.
De todas maneras, ahora el momento es mucho más oscuro que hace una década atrás y por lo mostrado ante los cruzados, es casi utópico pensar en un próximo repunte.
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