Mike Patton contó cómo la pandemia afectó su salud mental: “La idea de hacer más shows de Faith No More fue estresante”

Mike Patton, vocalista de Faith No More, Mr Bungle y más, habló por primera vez en profundidad respecto a los problemas de salud mental que significaron que tuviera que cancelar una gira con la popular banda de rock.

En conversación con The Guardian, el cantante de 54 años ahondó en lo que fue el aislamiento forzado que derivó de la pandemia del coronavirus a nivel mundial, y cómo pasó de amar la soledad que le proporcionó la crisis sanitaria a odiar enfrentarse a multitudes de personas.

El músico fue diagnosticado con agorafobia, un trastorno que consiste en la ansiedad de estar en lugares “de los que resultaría difícil escapar”, tal y como lo son las multitudes o espacios exteriores en general.

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“Mi respuesta inicial a la pandemia fue ‘¡amo esta mierda!’. ¡Me permitió ser un maldito antisocial!“, comentó al medio británico.

Sin embargo, agregó, fue tras cerca de tres meses que la situación cambió: “Ya que me había aislado tanto, salir pasó a ser algo difícil de hacer. Eso fue algo horrible. Y la idea de hacer más shows de Faith No More fue estresante. Me afectó mentalmente“.

Además, añadió que no solo fue la presión de hacer presentaciones en vivo, sino también el acudir al alcohol de manera desmesurada: “No sé por qué, pero el beber solo… sucedió”.

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Por otro lado, Patton agregó que si bien ya se encuentran trabajando junto al equipo de Faith No More para retomar sus conciertos, que aún permanecen cancelados, persiste algo de temor por lo que serán sus presentaciones.

Motivado por volver a los escenarios, el músico señaló que se ha mantenido sobrio desde hace un tiempo, asegurando que está “haciéndolo bastante bien”, pero que de todas formas tiene “miedo”. “Tengo miedo de mí mismo. La banda es sólida como piedra y yo quiero asegurarme de traerla. Hay algunos problemas en marcha”, comentó sin desarrollar más su respuesta.

Finalmente, sobre cuál querría que fuera su legado, Patton contestó: “No. Me. Importa. Una. Mierda”.