Este viernes uno de los temas más comentados en torno al quehacer de la Convención Constitucional ha sido la sanción que el Comité de Ética hizo al convencial Arturo Zúñiga (UDI) contra su par Marcos Barraza (PC) en medio de un pleno en agosto del año pasado.
“Decir que me denostó es poco, fueron insultos, y si esto se ventilara en tribunales, él claramente cometió una acción respecto de la ley de antidiscriminación: Él cometió un acto de anticomunismo brutal“, manifestó Barraza, agregando que los dichos de Zúñiga se dieron “a partir de algo que él señaló que era pecaminoso en Chile, que es ser comunista”.
“Creo que el Comité de Ética ha actuado conforme las herramientas que tiene”, continuó, señalando que “no es bueno que él no reconozca atribuciones a un órgano que fue normado por la propia Convención y por la mayoría de los constituyentes”.
Por su parte, Arturo Zúñiga respondió mostrándose disconforme ante la multa del 2% de su dieta que le fue impuesta como sanción, argumentando que “este comité fue hecho por personas que no creen en la libertad de expresión y que buscan acallar a quienes pensamos distinto en esta Convención”, añadiendo que “es por lo mismo que nosotros tenemos que pelear por la libertad de expresión, para que en el futuro en nuestro país ningún chileno tenga temor a pensar distinto y poder expresarlo“.
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“Resulta muy difícil reconocer la validez del Comité de Ética cuando han habido otras denuncias, como aquella del caso Rojas Vade, cuando sabemos que al día de hoy se han pagado $17 millones sin venir a trabajar ningún día”, sentenció.
“Esta sesión no puede llevarse a cabo”
En contexto, los dichos se dieron en medio de la controversia cuando en una sesión de la Comisión de Ética no se presentaron Zúñiga ni Katerine Montealegre. El representante de Vamos por Chile se excusó asegurando que, en vez de recibir el aviso de reunión con 24 horas de antelación, se le habría enviado 22 horas antes.
Durante la jornada, los coordinadores de la instancia María Elisa Quinteros (Asamblea Popular por la Dignidad) y Marcos Barraza (PC), dieron por iniciada a la sesión con las respectivas ausencias, a pesar de que Zúñiga había enviado un correo afirmando que ante su desconocimiento había agendado una actividad: “Insisto en que esta sesión no puede llevarse a cabo, menos aún cuando estamos votando”.
Al día siguiente, desatada la polémica, Barraza acusó al UDI de buscar “obstruir” la comisión. Zúñiga le contestó ofuscado que “por si no lo ha sabido y se lo puede preguntar a la coordinadora María Elisa Quinteros (…) que ella sabe perfectamente la razón por la cual yo no asistí, fue la misma por la cual tuve que ir hace dos semanas atrás, que es una razón médica de mi hijo de seis años“.
Y continuó: “Lo que usted hace, señor Barraza, es un acto de mala fe, una pequeñez política, una mezquindad, un acto de poca cosa, pero no me extraña porque usted es comunista“, agregando que “lo único que usted quiere es empobrecer a la ciudadanía y lo que está haciendo llenándose los bolsillos de plata con las asignaciones“, culminando solicitándole “por favor que se retracte”.
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