(CNN)Elon Musk, el fundador de SpaceX, CEO de Tesla y, más recientemente propietario de Twitter, organizó un evento llamativo para otra de sus empresas: Neuralink, la startup que propone implantes que conectan su cerebro a una computadora.

El evento mostró un video que mostraba a un mono usando un implante cerebral para controlar un cursor y escribir en una computadora. Dentro de seis meses podríamos ver los primeros humanos con chips en sus cerebros, según anticipó Musk.

No es una tecnología completamente nueva, ya que los investigadores han estado trabajando durante décadas en dispositivos que pueden decodificar señales cerebrales con un propósito práctico. Por ejemplo, permitir que una persona escriba palabras o juegue videojuegos solo con su cerebro ya se ha hecho antes.

Musk señaló durante el evento “mostrar y contar” que el objetivo principal de la noche era reclutar talento para Neuralink.

“La mayoría de las veces, las personas piensan que realmente no podrían trabajar en Neuralink porque no saben nada sobre biología o cómo funciona el cerebro”, dijo Musk. “Lo que realmente queremos enfatizar aquí es que no es necesario porque cuando analiza las habilidades que se necesitan para hacer que Neuralink funcione, en realidad son muchas de las mismas habilidades que se requieren para hacer que funcione un reloj inteligente o un teléfono moderno”.

DJ Seo, vicepresidente de implantes de Neuralink, mostró la última versión del dispositivo de la compañía y señaló que será inalámbrico y recargable. También compartió imágenes de un robot que, según dijo, fue construido para realizar la cirugía de implante y también realizó una demostración de cómo podría ser esa cirugía, y señaló que la fabricación y una clínica de prueba se estaban estableciendo en Austin, Texas.

Musk lanzó Neuralink hace más de cinco años con el objetivo de desarrollar tecnologías que puedan mejorar la conexión entre humanos y computadoras mediante la implantación de chips en los cerebros de las personas. La compañía hasta ahora solo ha probado en animales.

El año pasado, por ejemplo, Neuralink dijo que podía permitir que los monos jugaran el videojuego Pong usando solo sus implantes cerebrales, aunque algo similar ya se había logrado en un ser humano con un implante cerebral más de una década antes. Sin embargo, el uso de animales ha enfurecido a los activistas. La compañía ha reconocido que un mono había muerto durante el proceso de prueba.

“Hacemos todo lo posible con pruebas de laboratorio rigurosas, por lo que no somos arrogantes acerca de poner dispositivos en animales”, dijo Musk. La idea central detrás de Neuralink plantea numerosas cuestiones éticas y sociopolíticas, pero los defensores dicen que tales dispositivos brindan ayuda que cambia la vida de las personas amputadas y discapacitadas. 

Musk, sin embargo, también tiende a enfatizar los usos no médicos, como implantes cerebrales para nivelar el campo de juego, si la inteligencia artificial digital se vuelve más inteligente que cualquier humano. “¿Cómo mitigamos ese riesgo? ¿A nivel de especie?, preguntó Musk, agregando que “incluso en un escenario benigno, donde la IA es muy, muy benévola, entonces, ¿cómo seguimos el viaje?”.

Antes de que los implantes cerebrales de Neuralink se produzcan en masa y lleguen al mercado más amplio, necesitarán la aprobación regulatoria. La Administración de Drogas y Alimentos de EE. UU. publicó un documento en mayo del año pasado que describe los pensamientos iniciales de la agencia sobre los dispositivos de interfaz cerebro-computadora, y señaló que el campo está “progresando rápidamente”.

Musk aseguró que Neuralink ha presentado “la mayor parte” de su documentación a la FDA y podría comenzar a realizar pruebas en humanos dentro de seis meses.

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