Sinovac inicia operaciones para instalar su planta de producción de vacunas en Chile

Desde inicios de agosto del año pasado, la famacéutica china Sinovac Biotech dio a conocer su estrategia para comenzar a instalarse en nuestro país con la primera planta de producción de vacnuas contra el COVID-19 y otras enfermedades como la influenza y la hepatitis, transformándose en una de las principales inversiones de la compañía en Latinoamérica.

Según consignó este fin de semana el Diario Financiero, el mega proyecto farmacéutico se instalará en Quilicura y la empresa tiene contemplado que inicie sus operaciones a finales de 2022. De hecho ya hay decenas de personas contratadas para realizar los preparativos del desarrollo del negocio, así como se espera que a comienzos de marzo llegue una delegación de ejecutivos de Sinovac para evaluar los avances de la construcción.

Dentro de las convicciones de la firma, se encuentra la meta de producir 50 millones de vacunas contra las enfermedades inicialmente anunciadas y posiblemente, para contrarrestar la polio y la varicela. Asimismo, la teconología necesaria para su desarrollo solo está a la espera de ser importada desde el gigante asiático hasta nuestro país.

“Hay distintos perfiles que estamos buscando: técnicos en laboratorios, ingenieros, bioquímicos y farmacéuticos”, afirmó al respecto la vicepresidenta de Asuntos Corporativos de la sede local de la empresa, Virginia Garretón. Esto considerando que se trata de una inversión inicial de US$100 millones, necesarios para la construcción, funcionamiento y mantenimiento de la planta.

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Otro punto clave es que actualmente esta fábrica de vacunas es la meta a corto plazo de la farmacéutica. En ese sentido, la ejecutiva de Sinovac Biotech Chile añade que la empresa considera un plan “de investigación y desarrollo, ya que no se trata solo de producir vacunas. Hay que convencer a los gobiernos de que las inoculaciones son seguras“.

Asimismo, se tiene prevista la creación de programas de magísters y postgrados con la intención de ampliar la cantidad de profesionales con la formación necesaria para producir,  monitorear y comercializar las vacunas.