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En conmemoración del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, la Coordinadora Feminista 8M está desarrollando una serie de actividades en apoyo a la Huelga General Feminista.

Una de estas intervenciones fue la que se realizó este mediodía en la Catedral de Santiago, donde llegaron mujeres evangélicas y católicas que apoyan la huelga feministas, y que protestaron para denunciar los abusos, violaciones y la misoginia de las iglesias.

Tenemos desde la iglesia voces oficiales que no consideran nuestra voz de las mujeres a la hora de hacer las declaraciones públicas. Nosotras como mujeres estamos apoyando esta huelga, abrazando y denunciando también las realidades de los miles de abusos que se dan dentro de las iglesias y no son mostrados hacia afuera”, señaló la vocera y pastora pentecostal, Catalina Arias, a CNN Chile.

En medio de la actividad, un transeúnte creyente contrario a la protesta se acercó al lugar. “Me molesta que ocupen la iglesia acá, es un lugar sagrado para mí. No los padres, ni los curas, no defiendo eso, pero sí defiendo a la iglesia formada por Jesús”, señaló, agregando que “si ellas creyeran como yo, no harían eso aquí”.

En respuesta a sus palabras, la vocera señaló: “No necesitamos que los hombres vengan a hablar por nosotras. Tenemos nuestra propia voz. Respetamos su opinión, pero en este día, la voz es nuestra. Nosotras queremos decir que estamos de acuerdo con esta huelga, con las demandas de las mujeres y que la mujer debe reconstruir la sociedad, así como la ha lastimado”.

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