Obispos expresan “profunda preocupación” por proyecto de eutanasia: Es un “quiebre radical con la praxis médica”

Por CNN Chile

10.09.2025 / 20:59

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El Comité Permanente de la Conferencia Episcopal abogó por establecer procedimientos de de cuidados paliativos.


El Comité Permanente de la Conferencia Episcopal emitió una declaración expresando su “profunda preocupación” luego de que la Comisión de Salud del Senado aprobara la idea de legislar sobre la eutanasia.

Los obispos apuntaron a que esta decisión “contraviene de manera clara la enseñanza de la razón natural y reafirmada por la fe cristiana”.

El documento está firmado por René Rebolledo, arzobispo de La Serena y presidente de la instancia; Ignacio Ducasse, arzobispo de Antofagasta; Juan Ignacio González, obispo de San Bernardo; Fernando Chomalí, arzobispo de Santiago; y Cristián Castro, obispo de Santa María de Los Ángeles.

Y citando a san Juan Pablo II en la encíclica Evangelium Vitae, remarcaron que la muerte asistida “sigue siendo un acto inadmisible, incluso en casos extremos, ya que constituye «una grave violación de la Ley de Dios, en cuanto eliminación deliberada y moralmente inaceptable de una persona humana”.

También recordaron que la enseñanza de la Doctrina Social de la Iglesia “subraya que la compasión no es motivo suficiente para disponer la vida humana, aun con el consentimiento de la persona, y que la eutanasia ‘es un acto intrínsecamente malo, en toda ocasión y circunstancia'”.

En ese sentido, los obispos señalaron que el proyecto “representa un quiebre radical con la praxis médica que, durante siglos, ha sido guiada por el respeto a la dignidad de la vida humana, tanto en la tradición precristiana como en la cristiana”.

“La medicina tiene, por su propia naturaleza, una vocación de restauración y cuidado cuyo fin último es preservar y valorar la vida humana. Cuando la práctica médica se orienta a terminar la vida, pierde su misión esencial y se convierte en una extensión de un daño que es necesario denunciar con claridad”, acotaron.

Así, abogaron para que se continúen con los esfuerzos por establecer procedimientos de cuidados paliativos, que “son una forma integral de atención médica y espiritual que se dirige a aliviar el sufrimiento y a mejorar la calidad de vida de las personas que padecen enfermedades graves o terminales, sin buscar la curación de la enfermedad misma”.