El abogado y exfiscal naval lideró la oficina de Asuntos Especiales durante la dictadura y fue uno de los principales nexos con las iglesias y el Vaticano.
Sergio Rillón Romaní, abogado y uno de los asesores más cercanos de Augusto Pinochet durante la dictadura, falleció a los 95 años.
Su funeral se realizó este lunes en la Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, en Providencia, con una misa oficiada por el obispo Juan Ignacio González.
Nacido el 27 de diciembre de 1929 en Viña del Mar, Rillón tuvo una larga trayectoria en la Armada, donde alcanzó el grado de capitán de navío y se desempeñó como fiscal naval.
Posteriormente, asumió un rol clave en la dictadura como jefe de la oficina de Asuntos Especiales del Gobierno, desde donde operó como enlace con las iglesias y la Santa Sede.
Durante la ceremonia, el obispo González destacó la estrecha relación de Rillón con Pinochet y su vida familiar junto a Adrienne Fontaine, hija del excomandante en jefe de la Armada, Leopoldo Fontaine.
“Gozaba de la confianza del jefe del Estado. Algunas gestiones que realizó solo las conoció él”, señaló el obispo, quien también relató que en los últimos años lo visitó frecuentemente y lo asistió espiritualmente.
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