El pasado 27 de noviembre, el ministro de Salud, Jaime Mañalich, presentó una denuncia por amenazas en su contra en un cuartel de la Policía de Investigaciones (PDI).
Según consigna Radio Bio Bio, el secretario de Estado recibió en su teléfono personal mensajes de WhatsApp desde tres números distintos, pertenecientes a diferentes compañías.
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En su denuncia, Mañalich expone que en uno de los mensajes “se señala textualmente la intención de secuestrarme y matarme, además de diversos insultos que denostan mi calidad de persona”.
Además, en el documento se lee uno de los mensajes recibidos: “Bastardo c… como podí vivir con sangre de inocentes en tus manos, te la vamos a cobrar, vive c… de miedo no más macabro rec… porque te tenemos identificaooo (sic)”.
Por ello, amparándose en el artículo 219 del Código Procesal Penal, la fiscal oriente María Gómez Hoffer, solicitó al Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago una autorización para que las compañías telefónicas asociadas a los números entreguen el tráfico de llamados, la individualización del propietario de la línea y los tráficos de IMSI e IMEI. Estas diligencias fueron autorizadas por el tribunal el pasado 12 de diciembre.
De acuerdo a información que entrega Radio Bio Bio, desde el gobierno confirmaron que a partir del 18 de octubre decidieron redoblar la seguridad a varios de los ministros, debido a que podrían ser víctimas de atentados producto de la efervescencia social.
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