Tras 14 días, la machi Francisca Linconao depuso su huelga de hambre que había comenzado en protesta por, a juicio de su vocera, no llevarse a cabo un debido proceso. La autoridad mapuche llevaba 9 meses en prisión preventiva mientras se indaga su presunto vínculo con el asesinato del matrimonio Lucksinger-Mackay.
Linconao tomó la determinación a horas de que la Corte de Apelaciones de Temuco acogiera el recurso presentado por su defensa y rebajó su medida cautelar de prisión preventiva a arresto domiciliario.
No obstante, la machi permanece internada en el hospital de Nueva Imperial con dificultades de salud, según confirmó su vocera, Ingrid Conejeros. A su vez, afirmó que permanecerá en evaluación su permanencia en el recinto asistencial según los avances en la recuperación.
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