La ex mandataria socialista lleva menos de dos meses llevando a cabo su campaña.
Desde que comenzó a trabajar para ser electa pesidenta, la candidata realiza encuentros masivos con dirigentes sociales, anuncia reformas de fondo y aprovecha su ventaja en las encuestas para elegir cuándo y qué decir.
La estartegia de Michelle Bachelet se basa en una pauta propia, ya que ella no participa necesariamente de la contingencia ni responde los emplazamientos hechos por otros candidatos, ya que son miembros de su comando quienes toman esas banderas, uno de los que más salen al paso es el vocero Álvaro Elizalde.
Desde los otros comandos critican esta postura, donde aludirían que es una cierta “debilidad” de la ex presidenta. Una estrategia que se sabrá si fue o no efectiva el domingo 30 de junio, cuando se lleven a cabo las primarias presidenciales.
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