Durante la audiencia de formalización se revisaron los informes del sumario de 2020, que detallan diversas agresiones sufridas por los exfuncionarios destituidos del Hospital Base San José de Osorno. Además, la defensa de los imputados presentó su versión de los hechos denunciados.
Luego de que el Juzgado de Garantía de Osorno decretara prisión preventiva para dos de los cuatro exfuncionarios del Hospital Base San José de Osorno, mientras que a los restantes se les impuso arresto domiciliario total, se han conocido nuevos detalles de la audiencia de formalización.
En la instancia se revisaron los informes del sumario de 2020, donde el profesional del recinto hospitalario informó a su jefe directo —uno de los imputados— sobre agresiones sufridas por parte de sus compañeros, las cuales le provocaron lesiones en una de sus manos.
Según la defensa de uno de los exfuncionarios destituidos tras revelarse las diversas vejaciones contra su par con Condición del Espectro Autista (CEA), los hechos formaban parte de “juegos físicos” y no eran más que forcejeos o bromas, asegurando que el espacio laboral gozaba de un buen ambiente.
No obstante, el informe del sumario consignó diversas situaciones preocupantes, entre ellas: el resguardo del computador de la víctima bajo llave, el envío de mensajes por WhatsApp haciéndose pasar por él, grabaciones mientras se cambiaba en el baño y el bloqueo de su tarjeta de crédito.
El relato del cuarto imputado
El jueves 4 de septiembre, la Fiscalía de Osorno detuvo a tres de los cuatro presuntos responsables de torturas y vejaciones graves contra el profesional que trabajó en el área de informática del hospital entre 2018 y 2020.
Las diligencias fueron coordinadas por la fiscal jefe de Osorno, María Angélica De Miguel, en el marco de la investigación por presuntos delitos de tortura. En ese contexto, la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales (Brisex) de la PDI concretó la aprehensión de los tres sujetos.
La fiscal De Miguel explicó que se solicitaron cuatro órdenes de detención: “Confirmamos que, de las cuatro personas, tres han sido detenidas ya por la PDI, quedando pendiente una restante, que se está buscando en la ciudad de Osorno”.
El viernes 5 de septiembre, según publicó el Diario de Osorno, el cuarto exfuncionario del hospital se presentó de manera voluntaria, acompañado de su abogado, Máximo Silva.
“Tomó la decisión de asesorarse para enfrentar este proceso, que es duro y delicado, y que lo afecta desde el punto de vista psicológico. En ese sentido, como abogado le recomendé que lo más racional es colaborar para el esclarecimiento de los hechos”, señaló Silva.
El jurista agregó que su cliente trabajaba a contrata en el área de soporte informático y que conocía a la víctima, con quien compartía labores en la misma dependencia. Silva planteó que los registros difundidos a través de videos deben ser revisados, argumentando que se trataba de “dinámicas” del equipo para pasar el tiempo durante la pandemia.
Además, indicó que incluso la propia víctima habría participado voluntariamente en algunas de estas prácticas, situación que, a su juicio, corresponde esclarecer en el transcurso de la investigación.
“Hay bastante que aclarar, muchas aristas que esclarecer y nuestra intención es, en ese sentido, colaborar”, concluyó Silva.