El Tribunal Oral en lo Penal de Concepción dictó una pena de 12 años por el homicidio de un carabinero en servicio, además de 3 años y un día por maltrato de obra a Carabineros con resultado de lesiones graves.
Este viernes, Jhoyner Bonilla, ciudadano venezolano, fue condenado a 15 años de cárcel tras ser encontrado culpable del homicidio del carabinero Alex Salazar, ocurrido en marzo de 2023 durante un control policial en un local nocturno en la Región del Biobío.
El Tribunal Oral en lo Penal de Concepción condenó Bonilla a 12 años por el homicidio de un carabinero en servicio, además de otros 3 años y un día por maltrato de obra a Carabineros con resultado de lesiones graves.
A la pena se sumaron 61 días por maltrato con lesiones menos graves y 41 días por maltrato con lesiones leves a otros funcionarios, así como 61 días más por conducir en estado de ebriedad.
La jueza de la instancia, Antonia Flores, explicó que, a pesar de la severidad del crimen, se redujo un grado en cada una de las penas debido a la cooperación de Bonilla, tanto en sus diligencias como en su testimonio judicial.
Sin embargo, la sentencia fue más baja de lo que pedían tanto el Ministerio Público, que solicitaba presidio perpetuo simple, como los querellantes, quienes pedían presidio perpetuo calificado.
Además, no se aplicó la Ley Naín, que entró en vigencia después de los hechos ocurridos.
Detalles del caso
Según la información proporcionada por la Fiscalía, la muerte del cabo ocurrió después de que personal de Carabineros ejecutara una fiscalización en un local de alcohol que estaba funcionando fuera de horario en Concepción.
Diferentes personas que se encontraban al interior del local comenzaron a arrojar objetos contundentes, bebidas alcohólicas y latas de cerveza hacia los agentes de policía.
En ese contexto, Bonilla salió del local, subió a su vehículo con un nivel de alcohol en sangre de 1,79 grados y posteriormente atropelló a los carabineros que estaban llevando a cabo la fiscalización. Dos oficiales sufrieron lesiones leves, pero el cabo Alex Salazar fue embestido y arrastrado aproximadamente diez metros.
El uniformado terminó con un traumatismo encefalocraneano severo, fractura parietal izquierda con hundimiento, un hematoma subdural fronto temporal izquierdo y una contusión cerebral hemorrágica difusa.