La Fiscalía sostiene que la organización, integrada por ciudadanos venezolanos y ecuatorianos, operaba desde un edificio en Independencia y era liderada por Ricardo Vladimir Villón Pérez, alias “Lukas”, quien habría suministrado armas para asesinar a José Felipe Reyes.
Una violenta operación criminal que conectaba un secuestro, un caso de sicariato y presuntos vínculos con el Tren de Aragua fue desarticulada por el Ministerio Público tras una masiva redada en un condominio de la comuna de Independencia.
La Fiscalía sostiene que la organización, integrada por ciudadanos venezolanos y ecuatorianos, operaba desde el edificio ubicado en Inglaterra 1144 y era liderada por un sujeto identificado como Ricardo Vladimir Villón Pérez, alias “Lukas”.
La operación, que incluyó allanamientos simultáneos, se desencadenó luego de que las autoridades lograran vincular dos delitos de alto impacto: el asesinato de José Felipe Reyes, conocido como el “Rey de Meiggs”, ocurrido en junio en Ñuñoa, y el secuestro de un adolescente ecuatoriano de 16 años, apenas días después, en el mismo edificio intervenido por la policía.
Según la Fiscalía Metropolitana Oriente, ambos casos comparten un factor clave: el uso de la misma arma de fuego.
El arma, presuntamente proporcionada por “Lukas”, fue utilizada tanto en el homicidio de Reyes como para herir al menor secuestrado, quien recibió un disparo en la pierna tras negarse a colaborar con la banda.
Prisión preventiva para los imputados en el secuestro de adolescente
Durante la audiencia de formalización, la defensa de los imputados —entre ellos, Villón, Joanna Cedeño (pareja de “Lukas”) y su hijo Moisés— cuestionó que la víctima haya cambiado su relato.
Sin embargo, el tribunal acogió los argumentos de la Fiscalía y decretó prisión preventiva para todos los involucrados, considerando el peligro para la sociedad y la gravedad de los hechos.
Amenazas, tortura y una falsa coartada: Lo que ocurrió
El adolescente, identificado por sus iniciales J.D.B.M., fue privado de libertad por aproximadamente una hora.
En su testimonio, publicado por La Tercera, relató que fue abordado por tres sujetos en un vehículo y trasladado con una capucha cubriéndole el rostro hasta un departamento del edificio.
Allí, afirmó, fue golpeado, amenazado y presionado para integrarse a las filas de la organización.
“Me decían que eran del Tren de Aragua y que tenía que colaborar. Cuando me negué, me dispararon en la pierna. Usaron una almohada blanca para amortiguar el sonido”, relató la víctima en su declaración judicial.
El menor, herido, fue finalmente llevado por los propios secuestradores a la exPosta Central, donde le ordenaron declarar que había sido asaltado.
Y eso fue lo que hizo en un primer momento ante Carabineros. Sin embargo, semanas después, el 18 de julio, cambió su versión, dando pie a una investigación más profunda por parte de la Fiscalía.
La madre del menor, Marisela Miranda, también prestó declaración, asegurando que el primer testimonio de su hijo fue entregado bajo amenaza.
Según Miranda, los intentos de reclutar a su hijo por parte de “Lukas” se remontan a agosto de 2024.