A un año del incendio en El Olivar: Los nudos no resueltos de la reconstrucción

Por Michel Nahas Miranda

06.02.2025 / 13:07

El tiempo no ha sanado las heridas en este sector de Viña del Mar. Familias que lo perdieron todo en la tragedia ahora enfrentan obstáculos legales, técnicos y burocráticos para reconstruir sus hogares. Más detalles, en la nota de María Luisa Carrión.


El sector de El Olivar conmemoró este domingo un año desde el incendio que arrasó con más de mil viviendas y cobró la vida de 16 personas. En una ceremonia cargada de emociones, los vecinos recordaron la tragedia que los dejó sin hogar, separó comunidades y marcó un antes y un después en sus vidas.

Las dificultades son múltiples.

Desde problemas legales relacionados con las herencias y la tenencia de los terrenos, hasta la lentitud en la entrega de subsidios y la falta de acuerdo entre vecinos para la reconstrucción de viviendas compartidas. A esto se suma el temor constante de quienes han intentado permanecer en el lugar, enfrentando la amenaza de tomas y el desamparo ante la falta de seguridad.

Hasta ahora, el Serviu de Valparaíso ha entregado 195 subsidios y proyecta otorgar otros 652 en febrero. Sin embargo, obtener este documento no ha significado un avance rápido. Las características del terreno, las normativas actuales de construcción y los conflictos entre vecinos complican aún más un proceso que, según las autoridades, podría demorar varios años.

En algunos casos, la falta de acuerdo entre familias que compartían construcciones denominadas “cuatripareos” ha paralizado las obras. “Por tener un vecino que no es hábil, no nos pueden construir a nosotros tres”, reclamó una afectada, frustrada por los requisitos legales que perjudican a quienes sí están listos para reconstruir.

El Ministerio de Vivienda anunció ajustes al decreto que regula los subsidios, permitiendo que se reconstruyan hasta dos viviendas por persona en ciertos casos, lo que podría beneficiar a unas 400 familias adicionales. Sin embargo, los avances han sido lentos y los plazos inciertos.

Entre las pocas excepciones están cuatro familias que, gracias a un proyecto piloto de la empresa Elemental, han logrado levantar sus hogares mediante sistemas de prefabricación que prometen acortar los tiempos de construcción. A pesar de esto, el contraste con los cientos de familias que siguen en compás de espera es evidente.

Mientras tanto, los vecinos claman por soluciones concretas que les permitan recuperar no solo sus viviendas, sino también la comunidad que el fuego destruyó. “Me encantaría quedarme en El Olivar toda mi vida, pero ahora todo está vacío y nos hemos separado”, expresó una vecina.

A un año de una de las peores emergencias que ha enfrentado el país, la reconstrucción de El Olivar sigue siendo una deuda pendiente que pone a prueba la capacidad de respuesta de las autoridades y la resiliencia de quienes aún esperan volver a casa.