Este sábado, El Mercurio publicó una columna de opinión del presidente del Servicio Electoral (Servel), Andrés Tagle, quien cuestionó el sistema proporcional que eligió a quienes se encuentran redactando la nueva Carta Magna del país en la Convención Constitucional.
El ex militante de la UDI, en la carta editorial titulada “La igualdad del voto en la nueva Constitución”, indicó que “todos hemos tenido un solo voto en las elecciones en Chile. Ha valido lo mismo en los plebiscitos y en las elecciones donde se elige un candidato. Pero no ha valido lo mismo cuando se eligen las cámaras del Parlamento o para la Convención Constitucional, violando así un derecho humano esencial”.
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Ante eso, el mandamás del Servel aseguró que “el voto igualitario es un principio esencial de una democracia”, manifestando que “con el nuevo sistema proporcional la desigualdad se mantuvo“.
“El voto de las regiones en promedio valió 1,6 veces más que el de la región Metropolitana. Además, el sistema tiene inequidades inaceptables, como que la región de Atacama elija cinco diputados cuando la región de Tarapacá, con más habitantes, elige solo tres, o que la región del Biobío elija tres senadores, con un 50% más de electores que las regiones de La Araucanía y Maule, que eligen cinco cada una”, explicó.
En ese contexto, Tagle expresó que la Convención “fue electa con desigualdades graves en el voto que ponen en duda su origen democrático”.
“Territorios sobrerepresentados en escaños respecto de su población, escaños designados, asignados o reservados a determinados sectores o estamentos, son trampas a la democracia. Son subterfugios propios de las dictaduras para perpetuar su poder bajo la apariencia de elecciones democráticas”, agregó.
El también ingeniero comercial sostuvo que si “la nueva Constitución se fundamentó en la eliminación de las desigualdades, partamos entonces por eliminar la desigualdad del voto”.
“El voto de todos los electores debe valer lo mismo para elegir el Parlamento, no importa la edad, el sexo, la raza, la religión, el lugar donde se vive, los estudios, la profesión, el origen, el pertenecer a un pueblo originario, ser afrodescendientes, germano descendientes o croatadescendientes”, manifestó.
Frente a la designación de escaños reservados para los pueblos originarios, Andrés Tagle planteó que “es perfectamente posible”, respetando “al mismo tiempo la igualdad en el voto”.
“Los electores indígenas pueden conformar voluntariamente un padrón separado y votar por sus representantes, pero el número de escaños que elijan debe ser proporcional a sus electores”, cerró.
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