Por aclamación más de 150 países aprobaron el Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular de Naciones Unidas (ONU).

En el marco de la conferencia intergubernamental de la ONU, organizada en Marrakech, la decisión fue tomada durante la sesión plenaria presidida por el secretario general de la ONU, Antonio Guterres; la presidenta de la Asamblea General de la ONU, María Fernanda Espinosa, y Naser Burita, el ministro de Exteriores de Marruecos, país anfitrión de la conferencia

Gutierres, al abrir el debate, destacó que “este momento es el producto de esfuerzos inspirados”, agregando que “no debemos sucumbir al miedo” y lanzó un mensaje hacia los países que se negaron a firmar el pacto, entre los que se encuentra Chile, asegurando que “no es un tratado” y que “no es jurídicamente vinculante”.

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El texto garantiza “el derecho soberano de los Estados a determinar sus política de migración y su prerrogativa para gobernar la migración dentro de su jurisdicción, en conformidad con el derecho internacional”, señaló el secretario general.

El pacto deberá ser ratificado el próximo miércoles 19 de diciembre en la Asamblea General de Naciones Unidas.

Foto: Kiko Huesca / EFE

En su intervención, la presidenta de la Asamblea General de la ONU, María Fernanda Espinosa, sostuvo que “es un momento histórico porque damos un rostro humano a la emigración”, agregando que los Estados “por más poderosos que sean, no pueden afrontar el reto migratorio solos”.

En el encuentro que durará dos días se han hecho parte 15 jefes de Estado, 8 primeros ministros y numerosos cancilleres y responsables.

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Ante las reticencias de varios países, los oradores han reiterado que la soberanía de los Estados no se verá disminuida de ningún modo, y remarcaron que la migración plantea problemas globales, para lo cual amerita soluciones globales.

Al igual que países como Estados Unidos, Israel y Polonia, Chile ha decidido restarse de la firma de este pacto. En un comunicado, el Ejecutivo manifestó que el acuerdo tiene “tiene graves inconsistencias y contradicciones con aspectos centrales de la política migratoria que impulsa nuestro gobierno”, argumentando que se encuentra en trámite un proyecto de Ley de Migraciones, que está en total concordancia con los tratados internacionales bilaterales y multilaterales ratificados por Chile.

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Por su parte, el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, señaló al respecto que “nuestra posición es clara. Nosotros decimos que la migración no es un derecho humano. El derecho lo tienen los países de definir las condiciones de ingreso de los ciudadanos extranjeros”.

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