El ataque con ojiva de racimo en Kryvyi Rih deja decenas de heridos y daña infraestructura civil, mientras las negociaciones de paz enfrentan nuevos obstáculos.
(CNN) – Un misil balístico ruso con carga de racimo impactó este viernes en Kryvyi Rih, ciudad natal del presidente Volodymyr Zelensky, dejando 19 muertos —entre ellos nueve niños— y 72 heridos, incluido un bebé de tres meses.
El ataque, uno de los más mortíferos del año, dañó edificios residenciales, escuelas y un parque infantil, según confirmó el alcalde Oleksandr Vilkul, quien calificó el hecho como “un crimen sangriento del país terrorista”.
Mientras el Ministerio de Defensa ruso aseguró que el objetivo era una “reunión de comandantes ucranianos con instructores occidentales”, Zelensky denunció la “debilidad” de la respuesta estadounidense después de que su embajadora omitiera mencionar a Rusia en su condena.
“Guardar silencio solo alienta a los canallas en Moscú”, afirmó el mandatario, quien recibió el respaldo de embajadores europeos. Reino Unido y Alemania responsabilizaron directamente a Moscú: “Rusia es el agresor”, escribió el diplomático alemán Martin Jaeger.
El ataque ocurre en medio del estancamiento de las negociaciones de paz impulsadas por Donald Trump. El secretario de Estado Marco Rubio advirtió que “el tiempo se agota” tras reunirse con un enviado de Vladimir Putin, quien rechazó un alto el fuego inmediato.
Aunque EE.UU. logró un acuerdo para reducir hostilidades en el mar Negro, Rusia impuso nuevas condiciones, incluido el levantamiento de sanciones económicas, complicando el frágil proceso diplomático. La guerra entra así en su tercer año sin perspectivas claras de solución, mientras los ataques a civiles se intensifican.
"Simplemente se preocupan de atacar a la candidata", dijo el presidente de la UDI luego que el ministro del Interior hablara de que se buscaría "censurar" el debate democrático al oficiar a los ministros por responder a comentarios de la abanderada de Chile Vamos.
