La ministra del Interior de Reino Unido, Suella Braverman, recibió duras críticas tras afirmar que los inmigrantes que cruzan el canal de la Mancha en embarcaciones son una “invasión“.
Braverman se encontraba compareciendo en la Cámara de los Comunes luego de que un centro de acogida fuera atacado con bombas incendiarias. La oposición alertó que en el recinto había unos 4 mil inmigrantes, pese a estar diseñado para acoger a 1.600.
La secretaria de Estado defendió las condiciones del centro y sostuvo que “los británicos merecen saber quién se toma en serio la tarea de frenar la invasión de nuestras costas y quién no”. “Vamos a dejar de fingir que todos ellos son refugiados en apuros”.
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“Las personas que llegan aquí ilegalmente desde países seguros no son bienvenidas y no deberían aspirar a quedarse“, agregó la autoridad, quien también tildó de “inaceptable” el costo de alojar en hoteles a miles de inmigrantes mientras se tramitan sus casos, como se ha hecho ante la falta de espacio en los centros migratorios.
“Este gobierno está comprometido a hacer que entrar ilegalmente en el Reino Unido sea inviable. Intentarlo es innecesario, mortalmente peligroso, injusto con los inmigrantes que siguen las normas e injusto con la mayoría de británicos patrióticos que cumplen las leyes”, agregó.
El ministro de Inmigración, Robert Jenrick, tomó distancia de los dichos de Braverman. “En un cargo como el mío, uno tiene que escoger sus palabras con mucho cuidado (…). Yo nunca demonizaría a la gente que viene a este país en busca de una vida mejor”, dijo a Sky News.
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