Con información de CNN

Irán estaría rearmando su programa de misiles: Buque con suministros llegó desde China

Por CNN Chile

13.02.2025 / 20:49

{alt}

La primera de dos embarcaciones que zarparon desde el gigante asiático llegó hasta el puerto iraní de Bandar Abbas, con más de mil toneladas de productos químicos fundamentales para la fabricación de misiles militares, afirman fuentes occidentales a CNN.


(CNN) – El primero de dos buques que transportaban 1.000 toneladas de un producto químico de fabricación china que podría ser un componente clave del combustible para el programa de misiles militares de Irán ha anclado el jueves frente al puerto iraní de Bandar Abbas, según muestran los datos de seguimiento de los barcos. Podría ser una señal de que la producción de misiles de Irán ha vuelto a la normalidad después de los devastadores y vergonzosos ataques de Israel a fábricas clave el año pasado.

El barco, Golbon, partió del puerto chino de Taicang hace tres semanas cargado con la mayor parte de un envío de 1.000 toneladas de perclorato de sodio, el principal precursor en la producción del combustible sólido que alimenta los misiles convencionales de alcance medio de Irán, según dos fuentes de inteligencia europeas.

El perclorato de sodio podría permitir la producción de combustible suficiente para unos 260 motores de cohetes sólidos para los misiles Kheibar Shekan de Irán o 200 de los misiles balísticos Haj Qasem, según las fuentes de inteligencia.

El envío se produce en un momento en que Irán ha sufrido una serie de reveses regionales con la derrota colectiva sufrida por sus aliados: la caída de Bashar al-Assad en Siria y las pérdidas de Hezbollah en Líbano. Tras el ataque de Israel a las instalaciones de producción de misiles de Irán en octubre, algunos expertos occidentales creían que podría pasar al menos un año antes de que Irán pudiera reanudar la producción de combustible sólido. Esta entrega indica que Irán no está lejos de -o que ya podría haber vuelto a- la producción de sus misiles.

Manifestantes iraníes marchan junto a un misil de fabricación nacional durante una manifestación en conmemoración del aniversario de la Revolución Islámica de 1979 en Teherán a principios de esta semana. Vahid Salemi/AP.

El envío fue comprado en nombre del Departamento de Adquisiciones de la Organización de la Jihad de Autosuficiencia (SSJO), parte del organismo iraní responsable del desarrollo de los misiles balísticos de Irán, según las fuentes.

El segundo barco, Jairan, aún no se ha cargado ni ha salido de China, y ambos buques son operados por la compañía Islamic Republic of Iran Shipping Lines (IRISL), dijeron las fuentes a CNN. El Jairan tiene previsto transportar el resto de las 1.000 toneladas a Irán. El Golbon partió del puerto de Taichang hacia Irán el 21 de enero.

CNN se ha puesto en contacto con IRISL para solicitar comentarios.

Las fuentes no pudieron decir si el gobierno chino sabía de los envíos antes de que los medios informaran sobre su movimiento a finales de enero. La entrega de perclorato de sodio en sí misma no es ilegal ni viola las sanciones occidentales.

La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Mao Ning, dijo a los periodistas en enero que no estaba al tanto de los detalles del caso, pero que China siempre ha respetado sus leyes de control de exportaciones, así como las obligaciones internacionales del país.

Sanciones por la puerta trasera

Estados Unidos y el Reino Unido han impuesto sanciones contra la compañía Islamic Republic of Iran Shipping Lines, y el Departamento de Estado ha afirmado que la firma es la “línea naviera preferida de los proliferadores y agentes de adquisiciones iraníes”.

El Tesoro del Reino Unido dijo que la compañía estaba “involucrada en actividades hostiles” por parte de Irán y destacó sus vínculos con el sector de defensa iraní.

Tanto el Golbon como el Jairan están sujetos a sanciones estadounidenses.

Mientras tanto, China ha seguido siendo un aliado diplomático y económico de Irán, afectado por las sanciones, denunciando las sanciones “unilaterales” de Estados Unidos contra el país y dando la bienvenida a Teherán en Pekín y en bloques internacionales liderados por Moscú, como la Organización de Cooperación de Shanghái y los BRICS.

El sistema antimisiles Cúpula de Hierro de Israel intercepta cohetes después de que Irán disparara una salva de misiles balísticos el 1 de octubre de 2024. Amir Cohen/Reuters.

China también sigue siendo, con diferencia, el mayor comprador de energía de Irán, aunque no ha informado de compras de petróleo iraní en sus datos oficiales de aduanas desde 2022, según los analistas.

A pesar de los vínculos históricos de China con el sector de defensa de Irán, los observadores dicen que Pekín ha reducido los lazos de seguridad durante la última década en su intento de reforzar las relaciones con Arabia Saudí y otros estados del Golfo. Sin embargo, en los últimos años Estados Unidos ha sancionado a varias entidades chinas por presuntos papeles en el apoyo a la producción de drones militares iraníes. Los recientes ejercicios navales conjuntos entre China, Irán y Rusia también han señalado una posible profundización de los lazos estratégicos entre gobiernos.

Un ingrediente clave

Si bien Irán necesitaría propulsor sólido para una gama de misiles, incluidas armas de defensa aérea más pequeñas, la mayor parte de esas entregas probablemente se dirigirían al programa de misiles balísticos de Irán, dijo a CNN Fabian Hinz, investigador del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos.

Aunque el comercio de perclorato de sodio no está restringido por las sanciones occidentales, se puede transformar químicamente en perclorato de amonio, un combustible y oxidante que es un producto controlado.

“El perclorato de amonio es el material que se utilizó en los propulsores sólidos de los cohetes del transbordador espacial”, dijo a CNN Andrea Sella, profesor de química inorgánica en el University College de Londres.

“Realmente no hay muchas cosas alternativas” para las que se pueda utilizar el producto químico en los envíos chinos, aparte de propulsores de cohetes, fuegos artificiales y combustible, dijo, y agregó: “los percloratos tienen un rango bastante estrecho de usos”.

El aumento de los controles sobre los percloratos en Occidente ha hecho que China se convierta en un importante proveedor alternativo de dichos productos químicos, dijo.

China ha sido durante mucho tiempo “una fuente primaria de perclorato de sodio para los programas de misiles de Irán, desde al menos mediados de la década de 2000”, dijo a CNN Jeffrey Lewis, director del Programa de No Proliferación de Asia Oriental en el Instituto de Estudios Internacionales de Middlebury.

“Este es sólo el último envío de un patrón que ya tiene décadas”, añadió Lewis.

Problemas de suministro

El analista de defensa Hinz dijo que si bien Irán se ha jactado anteriormente de su capacidad para producir perclorato de amonio por sí mismo, esta entrega sugiere cuellos de botella en la cadena de suministro, ya que el suministro interno de precursores no ha podido satisfacer las necesidades de producción de misiles. Es un problema que incluso países como Estados Unidos pueden enfrentar, agregó.

Hinz dijo que la infraestructura de producción de combustible sólido de Irán se ha “expandido drásticamente en los últimos años, y potencialmente incluso desde el 7 de octubre (2023)”, con nuevos sitios construidos y ampliados los existentes.

Los misiles Kheibar Shekan tienen un alcance de 880 millas (alrededor de 1.420 km), y sus primos Haj Qasem pueden alcanzar objetivos a 900 millas (alrededor de 1.450 km) de distancia, según la fuente de inteligencia occidental. Aunque no son las armas técnicamente más avanzadas del arsenal de Irán, su alcance las hace valiosas para los ataques a Israel.

Hinz dijo que los hutíes, que cuentan con el apoyo de Irán, han utilizado variantes de esos misiles en Yemen contra Israel, a pesar de que la distancia supera ostensiblemente el alcance estándar de los misiles. Las modificaciones de la masa de la ojiva o de las unidades de propulsión secundaria podrían alargar su alcance, dijo.

El combustible sólido también se utiliza en los misiles de corto alcance de Irán, como los utilizados en el pasado contra las bases estadounidenses en la región y en las exportaciones a Rusia, dijo Hinz. Los misiles balísticos más grandes y poderosos de Irán suelen utilizar combustible líquido.

Se observan misiles durante un ejercicio conjunto llamado ‘Gran Profeta 17’, en el suroeste de Irán en 2021. Saeed Sajjadi/Fars News/WANA/Reuters.

Según las Fuerzas de Defensa de Israel, se recuperaron los restos de al menos un misil Kheibar Shakan tras el bombardeo iraní del 1 de octubre de 2024 contra Israel. El análisis de una de las fuentes occidentales confirmó que Irán disparó unos 50 misiles de mediano alcance con propulsión sólida contra Israel en este ataque.

Se cree que el arsenal de Irán contiene “más de 3.000 misiles balísticos”, dijo el general de la Fuerza Aérea estadounidense Kenneth McKenzie al Congreso en 2023, pero se desconocen las cifras exactas de cada tipo de misil.

Un funcionario de inteligencia occidental dijo a CNN que, aunque las agencias gubernamentales estadounidenses pertinentes están al tanto de la entrega, existe una preocupación limitada por el envío. Si Irán canaliza los productos químicos hacia la producción de combustible para misiles, especialmente en armas destinadas a Rusia, eso será motivo de mayor preocupación, dijo la fuente.

El gobierno iraní se negó a hacer comentarios en respuesta a las preguntas planteadas por CNN para este artículo.