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Un impactante video se dio a conocer en Chile, de un pequeño jugando en el borde de un balcón de un piso 21 de un edificio. Estaba en una guardería clandestina se supo. Es decir, informal.

El caso ocurrió en la comuna de Estación Central, ubicada en Santiago de Chile, y fueron los propios vecinos, alertados de la situación, quienes grabaron el video que se viralizó por redes sociales.

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El alcalde de la comuna, Felipe Muñoz, indicó que se trata de una guardería infantil clandestina sin permisos y que desde el municipio hicieron llegar los antecedentes a “las policías para que se pueda hacer esta fiscalización”.

El edil advirtió: “no solamente nos faltan carabineros y un nuevo Cesfam, sino que también nos faltan al menos 10 jardines infantiles en Estación Central”.

Mi reflexión es, primero, no olvidar esta noticia, que se viraliza en un día y después se olvida frente a otros temas que se toman la actualidad nacional.

Nada puede ser más grave y más urgente que haya niños que no tienen cupo en salas cunas y jardines infantiles, y que tengan que ser dejados en guarderías clandestinas.

Segundo: ¿cómo no podemos encontrar en medio de este clima político de conflicto un motivo para salir de las peleas y hacer un acuerdo nacional para solucionar esto?

Sea con cambios que hagan viable la Ley de Sala Cuna Universal, sea con agilizar los proyectos de un sistema nacional de cuidados que está en el programa de este Gobierno, hay que dar una solución de amplio apoyo y urgencia.

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La situación de estos niños es escalofriante. Esas madres y padres no tienen dónde dejarlos y ni la sociedad el Estado se hacen cargo.

Por favor, mi llamado es a priorizar la solución a este problema, no mañana, sino hoy. No olvidemos al niño del piso 21.

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