La ministra de Energía, Susana Jiménez anunció que llegó a acuerdo con tres empresas de distribución de energía con el fin de pagar a los propietarios de medidores antiguos por uno de los dispositivos inteligentes.
Se trata de las empresas Enel, Grupo Saesa y Chilquinta que entregarán un incentivo de $10 mil a cada propietario. El pago de estas tres empresas beneficiará a más de 2,4 millones de hogares.
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Ante este anuncio, la titular de Energía conversó con Marca Registrada donde señaló que “esto lo vemos como un incentivo interesante para que las personas se vayan informando y conociendo los atributos que tienen estos medidores inteligentes”.
Al ser consultada por la propiedad del medidor y del por qué estos aparatos inteligentes no son de los usuarios, la ministra señaló que el costo impide que esto sea un obligación.
“Al ser más sofisticados, son mucho más caros y por lo tanto es muy difícil pedirle a la gente que haga esta inversión y son muy pocos los que podrían hacer este gasto”, sostuvo Jiménez.
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En cuanto a los datos que estos medidores recopilarán en cada hogar, la ministra señaló que una vez que la ley de distribución esté completa, los datos serán compartidos solo si el usuario lo autoriza.
“La norma y el anexo técnico que va a arreglar toda la normativa de los medidores inteligentes establece que por ahora la información solo la pueden ocupar las empresas distribuidoras para efectos de facturación (…) y después cuando tengamos la ley de distribución, la información podrá ser compartida solamente si las personas las autorizan”, afirmó la titular.
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